LITERATURA CONTEMPORANEA. MODO DE PRODUCCION CAPITALISTA

LITERATURA CONTEMPORANEA

PUBLICADO DICIEMBRE 1, 2011 POR AJSHNMCC

  LITERATURA CONTEMPORÁNEA

La literatura contemporánea engloba la producción literaria “occidental” (producida en Europa y América) durante la Edad Contemporánea, es decir, a partir de la época de las revoluciones (tanto la Americana como la Francesa). Es un concepto difícil de aplicar a la literatura dado la intrínseca imbricación de la mayoría de las obras con sus antecesoras históricas, pero en este caso es un concepto definido más por valores de originalidad y ruptura estética que por cuestiones puramente cronológicas. Al igual que el arte moderno, la literatura contemporánea -también llamada moderna- se conoce así no únicamente por haber sido escrita sobre todo a partir del siglo XIX, sino por romper drásticamente con lo anterior.

Esta literatura contemporánea ha vivido varios movimientos o estilos literarios bien definidos:

El primero fue el romanticismo, un movimiento no sólo literario sino también cultural y político. El rechazo de la razón, la libertad como causa suprema, y el sentimiento por encima de todo crearon obras basadas en el predominio del “yo”, la evasión y la libertad formal. Goethe, Walter Scott, Lord Byron, José Zorilla, Espronceda o Mary Shelley son algunos de los autores más representativos de esta escuela.

Tan representativa fue la anterior que la siguiente etapa del movimiento literario se conoció como postromanticismo, aunque básicamente es un concepto artificial que designa al parnasianismo, el simbolismo y el decadentismo, tres “evoluciones” diferentes del anterior tronco romántico.

El siguiente movimiento unificado llegó a mediados del siglo XIX y se conoce comorealismo o naturalismo. Fue a su modo una reacción a los excesos románticos; conservó el costumbrismo anterior pero se libró del sentimentalismo, la fantasía y la anarquía formal. Nació con él la novela social, reflejo literario de la nueva sociedad de clases, y la novela psicológica, preocupada de los temperamentos y las motivaciones. Dickens, Pérez Galdós, Dostoievski, Émile Zola y Flaubert son algunos de los autores más representativos del movimiento.

Archivo:Literatura Universal.jpg

Tras ellos llega la experimentación propia del Modernismo, que aunque en España se ciñe a una serie de autores concretos internacionalmente se conoce como el inicio de las vanguardias. El elitismo frente a la cultura de masas, la de construcción y la experimentación encontraron en Hemingway, Proust, Joyce, o Virginia Woolf algunos de sus mejores exponentes.

Tras la Primera Guerra Mundial la literatura entró de lleno en las vanguardias. Primero

con el futurismo, el dadaísmo y el surrealismo, luego con una serie casi incontable de estilos personales y pura experimentación literaria. Jorge Guillén, Salinas, García Lorca, Luís Cernuda o Dámaso Alonso en España; Neruda, Huidobro y Mistral en Latinoamérica, Beaovir o Camus en la escena internacional so

n algunos de los más claros exponentes de este estilo.

Características

  • El narrador ya no es omnisciente
  • El lector tiene que adoptar una postura activa frente a lo que le es contado, ya que lo narrado no aparece como algo perfectamente explicado.
  • Se rompe con las unidades de tiempo y realidad, el desarrollo de la obra es ahora sin principio ni fin, los personajes aparecen y desaparecen, en ocasiones las historias ocurren en un día; sin que interese lo que pasa antes o después.
  • La historia que se narra es una justificación para que el autor  exponga sus propios criterios sobre el argumento o las situaciones que en ella se plantea.
  • Aparece la figura del protagonismo colectivo, donde apenas se caracteriza a los personajes, pues sobre el individualismo interesan más el sentimiento y las relaciones sociales.

 

 

 

CONTEXTO LITERATURA CONTEMPORANEA

 

 Hechos históricos:

  1. Finalización de las monarquías absolutistas. Época de  las grandes revoluciones: La Revolución Francesa (Revolución Burguesa y Liberal)
  2. La Guerra de la Independencia de EE.UU.
  3. Coincide con dos grandes guerras en España:
  4. La Guerra de la Sucesión (1700-1713), por la sucesión al trono de Carlos II, en la que hay dos aspirantes al trono: Felipe de Anjou (que pertenece a la casa de los Borbones) y el Archiduque Carlos (de la casa de los Austrias)
  5. Coincide con la aparición de un movimiento denominado Ilustración, que es la continuación del Renacimiento.
  6. 9 Noviembre 1989 – Caída del Muro de Berlín.
  7. 1939 Ofensiva nacional española en Cataluña.– Caída de Barcelona.– Los alemanes invaden Checoslovaquia, Hitler entra en Praga.– Termina la Guerra Civil Española
  8. 1914 estalla la Primera Guerra Mundial

                                                   Hechos culturales

En el aspecto literario, era precisa una profunda renovación que superase al romanticismo, al realismo, el neoclasicismo. La lucha contra las tradiciones, procurando la novedad y la libertad.

 Hechos Artísticos:

En pintura:. Se expresa la agresividad y la violencia violentando las formas y utilizando colores estridentes. Surgen diseños geométricos y la visión simultánea de varias configuraciones de un objeto.

En la literatura, y concretamente en la poesía el texto va a ser realizado a partir de la simultaneidad y la yuxtaposición de imágenes. Rómpase tanto con la estrofa, la puntuación, la métrica de los versos como con la sintaxis alterando por completo con la estructura tradicional de las composiciones

Fotografía: La fotografía abre una de las expresiones artísticas que mejor define las luces y sombras del siglo XX.

Cine: vivió su auge con la creación de los estudios de Hollywood.

Comics: nació de la mezcla de las tiras cómicas para periódicos con las revistas novelizadas, aunque en algunos lugares se les llamó “chistes

Hechos sociales:

La cuestión social, es decir, la conciencia de la grave situación de las clases bajas, y su percepción como amenaza por parte de las clases medias y altas, se había convertido en un tópico. Los escasos medios paliativos de la caridad tradicional, del paternalismo de muchos empresarios y de las llamadas a la justicia social por parte de instituciones religiosas o de otro tipo de asociaciones humanitarias, no parecían suficientes dada la magnitud de las masas degradadas a la condición de lumpen. Incluso desde las posiciones políticas burguesas (conservadoras, reformistas o liberales) se planteaba la necesidad de leyes (el derecho laboral) que protegieran a los trabajadores de las consecuencias más graves del pauperismo y la degradación social, a pesar de que tal cosa fuera incompatible con el concepto de estado mínimo liberal o con el respeto a la literalidad de las propuestas de la economía clásica. Desde fechas tan tempranas como 1830, aunque de forma esporádica e inorgánica, se fueron prohibiendo o limitando el trabajo infantil y el trabajo femenino; y mucho más adelante se fueron estableciendo diferentes tipos de controles sanitarios o de seguridad laboral e inspección de trabajo.

 Hechos políticos:

La política en este tiempo es muy complicada. Hasta el año 1868 la política responde a un signo liberal moderado. En dicho año se produce una Revolución, la Gloriosa, tras la cual Isabel queda destronada y en la que vence la burguesía progresista. Posteriormente se proclama en 1869 una Constitución que proclama amplias libertades como la libertad de expresión, la libertad de prensa, la libertad de culto. Pese a todo no acertó a encontrar una fórmula estable de gobierno ya que se produjo una fuerte reacción del sector tradicionalista. Esto dio lugar a la tercera guerra carlista. En el año 1875 la Restauración de la monarquía cierra esta época. En el gobierno se alternan los partidos dinásticos: los conservadores y los progresistas.

 

 

Aspectos relevantes en la vida de los escritores

 

REPRESENTANTES DE LA

LITERATURA CONTEMPORANEA

 1.    José Saramago

Nació en Azinhaga (Portugal) en 1922. Falleció a los 87 años, el día 18 de junio de 2010. En 1947 publicó su primera novela, “Tierra de pecado”, ” Saramago es dueño de un mundo propio, minuciosamente creado, libro a  libro, y su obra lleva muchos años situándolo en el primer plano literario de su país. Ya sus primeras publicaciones en prosa -”Manual de pintura y caligrafía” (1977) y “Alzado del suelo” (1980),- lo acreditan como un autor de indiscutible originalidad, por su controvertida visión de la historia y de la cultura., 1982 de su ya legendaria novela “Memorial del convento”, a la que siguió “El año de la muerte de Ricardo Reis”, “La balsa de piedra” (1986), “Historia del cerco de Lisboa” (1989), “El evangelio según Jesucristo” (1991), “Casi un objeto” (1994), “Viaje a Portugal” (1995). Ha recibido el Premio Camoes, equivalente al Premio Cervantes.

                                                                                                                    

1.2 Elementos que componen su creación literaria

Volver comprensible una realidad huidiza, con parábolas sostenidas por la imaginación, la compasión y la ironía

 

2.    Marcel Proust:

Escritor francés, nació en París, el 10 de julio de 1871 autor de la obra En Busca del Tiempo Perdido (1913-1927), considerada como una de las cumbres de la literatura universal., Su primera obra, una colección de ensayos y relatos titulada Los placeres y los días (1896), La prisionera (1923), La desaparición de Albertina y El tiempo recobrado. Tuvo una importante repercusión en toda la literatura del siglo XX.

 Marcel Proust

2.1 Elementos que componen su creación literaria

Proust exploró con valentía los abismos de la psique humana, las motivaciones inconscientes y la conducta irracional, sobre todo en relación con el amor.

 

3.    Arthur Miller

Dramaturgo hasta la médula, se le considera de los mejores del siglo XX (si no el mejor). Aunque ególatra, frío y orgulloso, fue un escritor comprometido socialmente. Su primera obra, la comedia “Un hombre con mucha suerte”. Después llegaría “Todos eran mis hijos”, “La muerte de un viajante”, luego la obra titulada Las brujas de Salem”. Seguida por “Recuerdo de dos lunes” y “Panorama desde el puente”, Después de años de trayectoria, reconocimientos y galardones, Arthur Miller fue reconocido en 2002 con el Premio Príncipe de Asturias. El 10 de febrero de 2005, el dramaturgo falleció

                                                                            

3.1 Elementos que componen su creación literaria

Sus obras están acompañadas de crítica a la sociedad estadounidense y los valores conservadores que la caracterizaban.

4. James Joyce

James Augustine Aloysius Joyce (Dublín, febrero 2 1882 – Zúrich, enero 13 1941) fue un escritor irlandés, reconocido mundialmente como uno de los más importantes e influyentes del siglo XX. Joyce es aclamado por su obra maestra, Ulises (1922), y por su controvertida novela posterior, Finnegans Wake (1939). Igualmente ha sido muy valorada la serie de historias breves titulada Dublineses (1914), así como su novela semi autobiográfica Retrato del artista adolescente (1916). Joyce es representante destacado de la corriente literaria denominada modernismo anglosajón,

James Joyce

 

4.1 Elementos que componen su creación literaria

La tradicional inspiración literaria al «estilo propio» en sus obras se destaca una relación conflictiva con su realidad y conflicto político e histórico, el uso excepcional del «flujo de conciencia», así como la exquisita técnica mediante la que desintegra el lenguaje convencional y lo dobla de otro, completamente personal, simbólico e íntimo a la vez, y la dimensión irónica y profundamente humana.

FRAGMENTO DE

LITERATURA CONTEMPORANEA

 

Marcel Proust

Por el camino de Swann (fragmento)

“Mucho tiempo he estado acostándome temprano. A veces, apenas había apagado la bujía, cerrábanse mis ojos tan prestos, que ni tiempo tenía para decirme: “Ya me duermo”. Y media hora después despertábame la idea de que ya era hora de ir a buscar el sueño; quería dejar el libro, que se me figuraba tener aún entre las manos, y apagar de un soplo la luz; durante mi sueño no había cesado de reflexionar sobre lo recién leído, pero era muy particular el tono que tomaban esas reflexiones, porque me parecía que yo pasaba a convertirme en el tema de la obra, en una iglesia, en un cuarteto, en la rivalidad de Francisco I y Carlos V. Esta figuración me duraba aún unos segundos después de haberme despertado: no repugnaba a mi razón, pero gravitaba como unas escamas sobre mis ojos sin dejarlos darse cuenta de que la vela ya no estaba encendida. Y luego comenzaba a hacérseme ininteligible, lo mismo que después de la metempsicosis pierden su sentido los pensamientos de una vida anterior; el asunto del libro se desprendía de mi personalidad y yo ya quedaba libre de adaptarme o no a él; en seguida recobraba la visión, todo extrañado de encontrar en torno mío una oscuridad suave y descansada para mis ojos, y aún más quizá para mi espíritu, al cual se aparecía esta oscuridad como una cosa sin causa, incomprensible, verdaderamente oscura. Me preguntaba qué hora sería; oía el silbar de los trenes que, más o menos en la lejanía y señalando las distancias, como el canto de un pájaro en el bosque, me describía la extensión de los campos desiertos por donde un viandante marcha de prisa hacia la estación cercana; y el caminito que recorre se va a grabar en su recuerdo por la excitación que le dan los lugares nuevos, los actos desusados, la charla reciente, los adioses de la despedida que le acompañan aún en el silencio de la noche, y la dulzura próxima del retorno”.

 

  • Características generales del fragmento: El narrador no es omnisciente. el desarrollo de la obra es sin principio ni fin, lo narrado no aparece perfectamente explicado, por esta razón el lector debe tomar una postura activa, frente a lo que le es contado.
  • Idea principal del fragmento: el cansancio mental de un no poder dormir , ni tampoco estar despierto sin sentir incertidumbre ni dejar de tener pensamientos que hacían desesperar su alma.
  •  Sentimientos que refleja el fragmento: soledad, tristeza, desolación, confusión, ansiedad
  •  Valoración general del fragmento: en general es un buen fragmento donde el lector debe ser muy activo para comprender algunas cosas que no son explícitamente dichas.

 

 

DIFERENCIAS ENTRE EL MOVIMIENTO DESCRITO CON EL ANTERIOR

 

LITERATURA MODERNA

LITERATURA CONTEMPORÁNEA

siglos      XV-XIX XIX-XX

 

Dieron paso a

A partir de este,  nuestro continente  comienza a tomar iniciativa artística e intelectual  y a expresar con voz propia en el acontecer cultural del mundo. Se da paso al irracionalismo, poniendose de moda la imaginación improvisación,  intuicióne impulso

simbolizó

El primer movimiento artístico y literario de habla española, nacido en nuestro continente. El espíritu de la época contemporánea: los problemas sociales, la actitudes irracionales.

 

LITERATURA VANGUARDISTA. MODO DE PRODUCCION CAPITALISTA

Creacionismo
Cubismo
Dadaísmo
Expresionismo
Futurismo
Surrealismo
Ultraísmo
Bibliografía
Libro de Visitas
Literaturas de Vanguardia
Movimientos literarios renovados que se desarrollaron en la primera mitad del siglo XX. La acepción primera de la palabra vanguardia pertenece al lenguaje militar. En Francia comienza a usarse aplicada a la política entre los socialistas utópicos hasta que adquiere, con Marx y Engels, el sentido de minoría esclarecida encargada de conducir la revolución.

Las Literaturas de Vanguardia surgen como una manifestación del rompimiento de cánones culturales establecidos con anterioridad.

Florecieron después de la Primera Guerra Mundial (1914-1918) y fueron sucediéndose hasta el desencadenamiento del segundo conflicto bélico en 1939.

Vanguardismo: Término de carácter militar aplicado en Francia a un movimiento literario que da origen a sucesivos ismos (DadaísmoCubismoSurrealismo,FuturismoExpresionismo, etc.) interrelacionados con las artes plásticas, la música, el cine, etc. Su denominador común es el carácter combativo y de ruptura con la tradición estética anterior (Realismo naturalista, Simbolismo, etc.) y el espíritu pionero en la búsqueda de nuevas formas de expresión artística y literaria: así como el deseo de liberación (y de rebeldía iconoclasta: FuturismoDadaísmoSurrealismo) de las trabas morales, políticas y religiosas que impiden la emancipación y desarrollo integral del hombre. Dicho movimiento se desarrolla a partir de 1910 (Futurismo) y tiene su mayor auge en la década de los años veinte, aunque algunas de sus manifestaciones continúan en la década de los treinta y aún después de la Segunda Guerra Mundial. En cuanto al ámbito geográfico, se trata de una corriente internacionalista, que si en algunos casos se circunscribe a un espacio más reducido, en otros se extiende a una amplia comunidad lingüística (el Ultraísmo se produce en España y en otros países de habla hispana como Argentina, Uruguay, Chile, México, etc.), y en otros se desarrolla en países culturalmente tan dispares como Italia y Rusia. Finalmente, en el caso del Surrealismo, se trata de un fenómeno que se implanta en múltiples países de España y América.

 

Un rasgo común a los vanguardismos es la citada interrelación de artes plásticas, música, cine y creación literaria. Un ejemplo de esta interacción lo ofrece elSurrealismo, cuya producción abarca la lírica y la narrativa, la pintura, el cine, etc. Otro ejemplo significativo lo ofrece elCubismo: los pintores Picasso, Braque, J. Gris, Metzinger conviven con poetas como Apollinaire, Cocteau, Salmon, Max Jacob y Reverdy, lo que explica el influjo de éstos sobre la estética cubista y las analogías entre ciertos poemas y ciertos cuadros de la mencionada estética. En cuanto a los géneros literarios, aunque la poesía es la más intensamente cultivada y donde se advierte una renovación mas llamativa, sin embargo, como se ha indicado a propósito del Surrealismo, también hay una notable creación teatral y narrativa.

 

En el Vanguardismo aparecen los siguientes rasgos comunes:

 

a)     Búsqueda de un arte autónomo y cerrado en sí mismo por el que se crea un mundo de ficción poblado de ultraobjetos (Ulltraísmo y Creacionismo).

 

b)     Eliminación de la anécdota y la narración, de lo didáctico, confesional y sentimental.

 

c)      Ruptura de las relaciones de causalidad y del concepto tradicional de espacio y tiempo, con lo que surgen en estos poemas mundos fantásticos y caóticos con imágenes fragmentarias, sorprendentes, contradictorias y absurdas.

 

d)     El instrumento creador de estos mundos autónomos es la fantasía a través de la palabra, a la que se concede un valor mágico y demiúrgico que transforma los objetos en ideas y esencias (poesía pura) y que evoca contenidos misteriosos a través de la sugestión fónica del lenguaje poético.

 

e)     Culto a la imagen creada y a la metáfora insólita.

 

f)        Desdén por el arte del pasado.

 

g)     Actitud lúdica, agudeza y humor, concepción de un arte intrascendente.

 

h)      Admiración por la técnica, el progreso y los descubrimientos científicos (Futurismo), cosmopolitismo y fraternidad universal.

 

i)        En cuanto a los géneros cultivados, la poesía lírica es predominante; también se crea una prosa vanguardista en narrativa.

 

 

Por lo que respecta al Vanguardismo español e hispanoamericano, los movimientos europeos que mayor incidencia han podido tener en él son el Surrealismo (cuya creación en España ha sido de una gran calidad y originalidad), el Expresionismo y, en menor mecida, el Futurismo y elDadaísmo. Una característica de la literatura española en este período de los años veinte es, precisamente, su apertura al mundo exterior a través de la vanguardia europea. Se ha apuntado que por primera vez desde el siglo XVIII España participa con voz propia en las corrientes intelectuales europeas a partir del Ultraísmo, <<movimiento en el que se juntaron elDadaísmoFuturismo y Cubismo literario o Creacionismo>>.

 

Visitantes desde el Lunes 17 de junio de 2002:

LITERATURA DEL MODERNISMO. MODO DE PRODUCCION CAPITALISTA

  1. Razón del termino «Modernista»
  2. Comienzos
  3. Características y Estilo
  4. Modernismo y otras corrientes literarias
  5. Rubén Darío
  6. Conclusión
  7. Bibliografía
  • Introducción

A continuación realizaremos una explicación acerca de una de las mas importantes e influyentes corrientes literarias conocida como Modernismo, que ocupo un lugar muy importante durante fines del siglo XIX y principios del XX. Esta corriente fue un resultado varios pensamientos nuevos y tomados de anteriores pensamientos literarios como por ej: el Romanticismo. Este cumple un papel no muy amplio pero de alguna manera importante dentro del Modernismo, lo cual lo averiguaran a continuación durante el desarrollo del informe.

Desarrollo

  • Razón del termino «Modernista»

El termino «moderno» se utiliza para nombrar lo que sigue la «moda» de una época, es decir aquello que va de acuerdo con las tendencias de su tiempo. La iniciativa de dar este nombre al movimiento de América Latina partió de Rubén Darío, quien es un articulo sobre Ricardo Contreras publicado en Chile publicado en 1888, califico el estilo de este escritor mexicano como «expresión moderna». Dos años mas tarde, en un comentario sobre una visita realizada a Ricardo Palma, empleo el termino «Modernismo» para calificar el «espíritu nuevo» que movía a un grupo de escritores.

Durante un tiempo la denominación fue empleada de una manera peyoritativa, para referirse a la nueva generación de escritores llamándolos decadentes, amanerados y extranjerizantes. El modernismo no recibió el reconocimiento y el respeto publico hasta que Rubén Darío se acredito su legitimidad como movimiento estético con valores propios y con fuerzas renovadoras positivas.

  • Comienzos

El modernismo literario tuvo su origen en Hispanoamérica, entre los años 1880 y 1914, impulsado en especial por el poeta nicaragüense Rubén Darío.

Aquí en Hispanoamérica se registro una lenta pero creciente reacción contra las corrientes académicas y románticas, protagonizadas por varios y renombrados escritores como por ejemplo González Prada, Salvador Díaz Mirón, entre otros.

En el desarrollo del modernismo, es posible identificar los siguientes momentos:

Iniciación: La primera generación modernista (1882-1896). José Martí y Manuel Gutiérrez Nájera inician un trabajo de actualización de la lengua, principalmente en la prosa, aunque también en el verso, muy fijos al modelo español.

Culminación: En 1888, Rubén Darío publica su libro Azul. En esta época ya se habían realizado grandes innovaciones en la palabra poética. Por medio de su obra en Chile, Argentina y España, Darío realiza una tarea excepcional, que consolida el Modernismo como movimiento continental y se convierte en su síntesis más brillante, tanto en América como en España. En 1896 se edita Prosas Profanas, el libro de Darío que oficializa el Modernismo en Hispanoamérica.

Continuación: La segunda generación modernista. Consagrado Rubén Darío como jefe de la escuela del Modernismo, cuando ya los iniciadores habían muerto prematuramente, los escritores de esta segunda generación continuarían la obra con sus aportes personales. Ellos son, entre otros, Leopoldo Lugones, Ricardo Jaimes Freyre, Amado Nervo, y Julio Herrera y Reissig.

  • Características y Estilo

En sus comienzos, el estilo modernista fue muy recargado y estuvo dominado por los temas exóticos e indigenistas, pero con el tiempo se fue haciendo cada vez mas depurado y alcanzo expresiones de gran purismo lírico, como las rimas de Juan Ramón Jiménez.

Los temas preferidos por los poetas modernistas reflejaban el mundo antimista y subjetivo del autor, así como una atracción por lo original e insólito y cierta carga de melancolía.

El poeta sentía una absoluta necesidad de evadirse hacia paraísos idílicos y una gran añoranza del pasado mítico y legendario, sentimientos que solían acompañarse del culto por la belleza y lo erótico y del rechazo del mundo real.

Es muy frecuente la alusión de culturas lejanas, también los escritores de este movimiento se caracterizaban por su deseo de ser cosmopolitas y trascender la realidad en la cual vivían, esto los llevo a tomar imágenes tomadas de culturas exóticas, europeas, de Oriente o pertenecientes a otras épocas.

Para expresar sus preocupaciones y sentimientos, los modernistas recurrieron a una renovación formal y estilística, en la que eran frecuentes los símbolos, los giros complejos con palabras de gran sonoridad o la laberíntica combinación de las rimas de un amplio vocabulario metafórico, integrado por un amplio vocabulario metafórico, integrado por flores (loto, crisantemo, nenúfar), animales (cisne, ibis, cóndor), piedras preciosas, colores, ciudades exóticas y abundantes referencias a otras artes.

  • Modernismo y otras corrientes literarias

Entrándonos un poco mas al tema de la evolución, nos encontramos con otra corriente literaria conocida como Romanticismo.

Este movimiento romántico, que domino el horizonte de las letras hispánicas durante todo el siglo XIX, se convirtió para los poetas modernistas en el fantasma que se deseaba superar.

Entre los autores de este moviento el único cuya importancia se reconoció y se mantuvo fue Gustavo Adolfo Bécquer. Los demás eran vistos como representantes de una poesía demasiado cargada de razón y logicismo, que era necesario dejar atrás.

En su faceta americana, el romanticismo significo también una exaltación del sentimiento patrio, lo cual llevo a que gran parte de los autores hicieran una poesía dedicada al elogio de los héroes de la independencia y los momentos de gloria nacional. Los cánones del momento dictaban que la poesía debía estar dedicada a la exaltación de sentimientos nobles y a la difusión de ideas filosóficas, políticas, sociales.

Los modernistas quisieron liberar a la creación poética autónoma y que su único propósito era buscar belleza. Del Romanticismo, sin embargo, tomo el modernismo algunos de sus temas, entre ellos la evasión a mundos irreales o exóticos, la melancolía, el desencanto y la duda existencial. También el gusto por la vida bohemia y la actitud desdeñosa frente la sociedad burguesa fueron motivos románticos que los modernistas acogieron en sus creaciones.

Finalmente en las primeras décadas del siglo XX el Modernismo en América Latina dio paso a las escuelas de vanguardia, que se impondrían con fuerza en todo el continente. Sin embargo, la influencia de la escuela de Rubén Darío siguió siendo importante en muchos países durante varios años y muchos poetas que no se acogieron a los movimientos de vanguardia y continuaron por la senda que había abierto el nicaragüense. Pero igualmente poco a poco comenzaban a llegar jóvenes autores cargados con la influencia de los surrealistas, dadaístas, etc. (algunas características del vanguardismo), que nuevamente habían tomado de la gran inspiración de Europa, sin embargo los autores latinoamericanos ya habían aprendido a elaborar las influencias llegadas de fuera para convertirlas en materia propia.

Simultáneamente con la llegada del Vanguardismo y la continuación del Modernismo, existía en América Latina una tendencia al Realismo, que domino sobre todo en el campo de la prosa.

Y así con todo lo que significo el Modernismo en su momento, paso a ser el modelo para atacar y superar.

A continuación haré una breve cronología de la vida Rubén Darío y acotare una de sus obras.

Rubén Darío

Nació en Metapa, Nicaragua, en el año 1867. Su verdadero nombre era Félix Rubén García Sarmiento.

Fue periodista y diplomático. Hasta 1898 vivió, publicó y actuó en Chile, Centroamérica y la Argentina. En 1898 viajó a España, y vivió en Francia y otros países de Europa.

Murió en León, Nicaragua, en 1916.

Escribió prosa y poesía. Entre toda su producción se destacan tres

Obras que ayudan a comprender la evolución del Modernismo: Azul, Prosas profanas y Cantos de vida y esperanza. Los raros, en prosa, y El Canto Errante son otras de sus obras.

Tres Obras:

Azul (1888): fue su primera obra importante. Publicada en Valparaíso, está constituida por relatos breves y algunos poemas. Significó para su autor el reconocimiento en América y en España. Sus rasgos son: sensualidad, erotismo y musicalidad. En los sonetos que cierran la obra, Darío revela sus preferencias y su cosmopolitismo.

Prosas profanas: fue publicado en Buenos Aires, en 1896. Las variaciones temáticas y las audacias métricas, son tantas que provocaron en América y en España grandes polémicas. Predomina el tema erótico, envuelto en un arte cromático y perfecto.

Cantos de vida y esperanza (1903): Los temas del libro son, entre otros: el paso del tiempo, la misión del poeta, la búsqueda de la fe, la preocupación por el futuro de América, etc. El libro termina con una expresión de temor y duda sobre el misterio de la vida. De contenido diferente, este volumen presenta el mismo cuidado formal y la notable variedad de metros y riqueza de lenguaje que caracterizan al gran poeta.

Sinfonía en gris mayor

El mar como un vasto cristal azogado,

refleja la lámina de un cielo de zinc;

lejanas bandadas de pájaros manchan

el fondo bruñido de pálido gris.

 

El sol como un vidrio redondo y opaco,

con paso de enfermo camina al cenit;

el viento marino descansa en la sombra

teniendo de almohada su negro clarín.

 

Las ondas que mueven su vientre de plomo,

debajo del muelle parecen gemir.

Sentado en un cable, fumando su pipa,

está un marinero pensando en las playas

de un vago, lejano, brumoso país.

 

Es viejo ese lobo. Tostaron su cara

los rayos de fuego del sol de Brasil;

los recios tifones del mar de la China

lo han visto bebiendo su frasco de gin.

 

La espuma impregnada de yodo y salitre,

ha tiempo conoce su roja nariz,

sus crespos cabellos, sus bíceps de atleta,

su gorra de lona, su blusa de dril.

 

En medio del humo que forma el tabaco,

ve el viejo el lejano, brumoso país,

adonde una tarde caliente y dorada,

tendidas las velas, partió el bergantín.

 

La siesta del trópico. El lobo se aduerme.

Ya todo lo envuelve la gama del gris.

Parece que un suave y enorme esfumino

del curvo horizonte borrara el confín.

 

La siesta del trópico. La vieja cigarra

Ensaya su ronca guitarra senil,

y el grillo preludia un solo monótono

en la única cuerda que está en su violín.

En este poema podemos destacar varias de las características que hacen al Modernismo, y que Darío utiliza poco herramientas básicas e infaltables en sus obras.

  • Conclusión

Luego de haber hecho mención de cómo el Modernismo se fue formando y cuales fueron sus características como corriente literaria, arribo a un pensamiento bastante positivo acerca del tema, creo yo que fue una corriente que tuvo, sin duda alguna, de exponente a Rubén Darío, y que si no fuera por su influencia el «Modernismo» no seria lo que hoy en día conocemos como un pensamiento totalmente mágico que toma del Romanticismo pero no entrega nada, ya que las corriente que le continúan poseen una ideología totalmente nueva y diferente. Asimismo lo que quieren lograr estas corrientes es apartar totalmente al Modernismo, objetivo que de alguna forma no logran ya que en la actualidad aun las famosas obras, como por ejemplo las de Rubén Darío, continúan siendo renombradas y apreciadas por la población en general.

  • Bibliografía

Macropedia

1995, Enciclopedia Hispánica

Enciclopedia Norma

1997, Literatura Universal

 

Julieta Cid

 

Materia: Antropología Sociocultural

Leer más: http://www.monografias.com/trabajos16/modernismo-literario/modernismo-literario.shtml#ixzz35QXRZMt0

LITERATURA NATURALISTA. MODO DE PRODUCCION CAPITALISTA

domingo, 9 de octubre de 2011

¿Que pasaba en europa, cuando surgio el naturalismo?

El período en el que destacaron fue una época inestable:

– En Europa distintos movimientos revolucionarios lograron la erradicación del absolutismo, y en algunos países el triunfo de la burguesía como clase dominante.

– En España, la situación política fue muy inestable. En 1868 tuvo lugar la revolución liberal, llamada “La Gloriosa”, que supuso el destronamiento de la reina Isabel II. Más tarde se proclamó la Primera República y en el espacio de un año hubo cuatro presidentes.

En cuanto a la sociedad, dos grupos sociales eran los más influyentes:

– La Burguesía capitalista, que estaba formada por grandes empresarios y terratenientes. En ese momento se consolida, políticamente y se vuelve conservadora.

– El proletariado, clase a la que pertenecen los obreros y los campesinos, intenta defender sus intereses.

En el ámbito filosófico, son varias las filosofías que se desarrollan en esta época:

– El Positivismo nace como ideología opuesta al Romanticismo. Sólo se admite como verdadero lo descubierto mediante la observación rigurosa y la experimentación.

– El Determinismo, según el cual el destino del ser humano está marcado por su herencia genética y por la influencia del medio social en el que se desarrolla su vida.

– El Marxismo, primer movimiento obrero que busca la lucha de clases y la revolución obrera para acabar con el injusto mundo burgués. Marx publica su manifiesto comunista en 1848; aunque a España llega en 1872.

El primer gran movimiento de la Revolución Industrial fue detenido en Inglaterra por las guerras napoleónicas y relanzado después, ya en forma definitiva, hasta la mitad del siglo. Tras el ferrocarril (1830), la reforma del Parlamento (1832), la supresión de la esclavitud en las colonias (1833), la sociedad de la época se sentía impulsada por las nuevas fuerzas espirituales que aportaba el liberalismo y por las renovadas fuentes de energía material. Estas reformas, inventos e iniciativas, que transformaban los modos seculares del trabajo productivo y repercutían, uno tras otro, sobre cada frente del conjunto de la economía, parecían traer consigo la promesa de un futuro rotundamente optimista. Un progreso que proporcionaría el bienestar a todos y, de momento y en primicia, prosperidad a una burguesía laboriosa y emprendedora. 

 
Durante el siglo XIX se produce el auge y la consolidación de la burguesía como clase social diferenciada de aristocracia y pueblo, con unos intereses, aspiraciones y visión del mundo propios. Su afianzamiento se basa en el enriquecimiento económico y en el ascenso al poder político, conseguido a través de las distintas revoluciones burguesas que se propagan por Europa desde mediados de siglo. Otra fuerza social que irrumpe con vigor es el proletariado, nacido de las nuevas relaciones laborables y humanas que surgen tras la industrialización. La diferencia entre las dos clases sociales se refleja principalmente en la ciudad, escenario de los grandes cambios sociales. El nuevo urbanismo establece un modelo de ciudad en el que burguesía y proletariado habitan zonas distintas al concentrarse la población trabajadora en barrios periféricos Muy distinta es la situación en el campo, ya que el trabajador agrícola, con una mentalidad conservadora y ajeno a las organizaciones revolucionarias, sigue apegado a las formas tradicionales sirviendo con fidelidad a los terratenientes, los cuales velan por sus propios intereses económicos y políticos controlando con procedimientos caciquiles el trabajo y el voto de sus obreros.
 
Así Europa se ve envuelto en una seria de revoluciones y ideas y clases sociales, que sacudieron y cambiaron el pensamiento de la sociedad de la época que se veía impulsada por el liberalismo que comenzaba a surgir.


Fuente: http://html.rincondelvago.com/realismo-y-naturalismo_3.html
http://html.rincondelvago.com/realismo_naturalismo_1.htm

jueves, 6 de octubre de 2011

La sociedad de la epoca

En la segunda mitad del siglo XIX el progreso, los adelantos y los descubrimientos no sólo han transformado las formas tradicionales de vida, sino que ofrecen al hombre la esperanza de mejoras ilimitadas. La filosofía deja la especulación abstracta y centra el objeto de su estudio en aquellas fenómenos que pueden ser observados y experimentados. La filosofía abandona el pensamiento abstracto para interpretar la historia, la sociedad y el hombre a partir de la materia. La teoría que proponen se denomina materialismo histórico, y su sistema socialismo científico.


Desde este punto comienza una búsqueda por la una representación exacta de la realidad, por mas simple, o mas desagradable que sea, buscan plasmarla tal y cual es, adquiriendo una visión mas científica de todos los fenómenos, sociales y naturales.




Fuente: http://html.rincondelvago.com/realismo_naturalismo_1.html

martes, 4 de octubre de 2011

El naturalismo, y la literatura de la epoca

El naturalismo es un movimiento literario que tuvo lugar aproximadamente entre finales del siglo XIX (a partir de 1880) y mediados del siglo XX (fundamentalmente hasta 1940). No obstante las raíces el movimiento son anteriores, pues los escritores naturalistas tomaron sus ideas y las desarrollaron a partir del movimiento literario dominante durante el siglo XIX, el realismo.

Algunos criticos han tratado de etiquetar el naturalismo como una especie de «realismo radical», pero este movimiento tiene suficiente personalidad y profundidad como para ser apartado del realismo y considerado diferente.


En resumen, allí donde el realismo era básicamente descriptivo, meramente literario y únicamente atento hacia la capa social burguesa -principal promotora y consumidora del mismo-, el naturalismo resultó un movimiento con influencias más profundas -entre las que destacan sobre todo la teoría de la evolución de Darwin y la filosofía determinista- y metas mas altas -no sólo mostrar la vida de su época “tal como era” sino terminar “por qué era como era”, y hacerlo sin omitir sus aspectos más hermosos ni tampoco los más desagradables-. Las obras naturalistas solían incluir, de hecho, la pobreza, el racismo, el sexo, los prejuicios, la enfermedad, la prostitución, la suciedad y la muerte tratadas de una forma exenta de dramatismo, lo que las hizo algo difíciles para el público en general y consiguió que fueran criticadas por ser demasiado directas y francas. Frente al optimismo y al progresismo liberal del que solían hacer gala los escritores realistas, el naturalismo se mostraba fuertemente pesimista; y en contra de la “apología de la libertad” propia de los realistas, los naturalistas negaban la libre voluntad y se refugiaban en su pesimismo determinista, afirmando que las condiciones sociales y naturales de los personajes les impiden vivir de acuerdo con su voluntad.

En este sentido, los naturalistas se mostraron muy interesados en abordar sus obras desde un punto de vista “científico”, intentando identificar las fuerzas ocultas que influencia las acciones de los personajes. Esas fuerzas serían principalmente el ambiente en el que esos personajes crecen y operan, así como la herencia que reciben o, en otras palabras, la posición social y económica que ocupan.




El máximo representante, principal impulsor y primer teórico del naturalismo fue el escritor francés Émile Zola, quien dejó canonizado el género en el prólogo de su novela Thérèse Raquin. Desde Francia el naturalismo se extendió a Alemania, Italia -donde se denominó verismo-, a Rusia -donde influyó en autores como Gogol y Dostoiveski- , a España y también a Latinoamérica y a los Estados Unidos.


Caracteristicas del naturalismo


El argumento: Carece de singularidad, pretende representar lo normal y cotidiano. Sólo se refleja un tramo de la vida de los personajes. Con la llegada del naturalismo, el argumento deja de ser un entretenimiento para convertirse en estudio social.
Los temas: La novela introduce temas palpitantes de la sociedad en que se escribe y lee la obra, tales como las tensiones ideológicas, o los episodios contemporaneos. Irrumpe con fuerza el mundo del trabajo y el dinero como móvil imperante de la sociedad. Bajo la influencia del naturalismo aparecen nuevos temas tratados con una óptica distinta y con mayor crudeza de tono. Del amor irrumpen los aspectos carnales y de la pasión interesa el impulso carnal. Conforme la novela se aproxima al final del siglo, sus contenidos se tornan más simbólicos e intelectuales.

Los personajes: Son vulgares y grises, sin rasgo ni distintivo especial, destaca la gran importancia prestada al personaje femenino. En la primera etapa del Realismo los personajes son encarnación de ideas. Progresivamente los personajes se aproximan a los seres de carne y hueso. Contrasta la forma de ser presentados. El naturalismo contempla al personaje como animal sujeto a leyes de la naturaleza y a las de la sociedad.

El tiempo: El conflicto se desarrolla a lo largo de unos años que resultan centrales en la vida del personaje. La obra comienza en el punto en que va a iniciarse el conflicto dominante de la novela. A continuación se retrocede en el tiempo para relatar o resumir hechos del pasado que interesa conocer. Una vez que se ha relatado el pasado y se alcanza el punto inicial, la narración continúa hacia delante. Esta estructura narrativa se denomina in medias res, osea, comenzar desde la mitad de la historia.

El espacio: Los espacios son verosímiles y se dibujan con gran acumulación de detalles. Muchas veces son reales. Aparecen con gran profusión los espacios urbanos y las zonas alejadas de las ciudades. También los espacios interiores. El conjunto de la novela es la interacción del personaje con el mundo exterior.

 
Las técnicas narrativas: La pretensión de representar la realidad exige un narrador que conozca íntegramente la historia y el mundo interior de los personajes, por tanto se necesita un narrador omnisciente. El naturalismo exige además del narrador que no haga ninguna intervención directa ni valoración alguna. Las descripciones son abundantes en esta época. El diálogo es una forma de lograr impasibilidad narrativa, ya que en él sólo se escucha la voz pura del personaje. No es de extrañar, pues, que se empleen abundantes diálogos. El estilo indirecto libre es una novedad introducida por los realistas para ofrecer íntegramente las palabras o el pensamiento del personaje sin que sea anunciado por el presentador. También adquiere gran importancia en algunos pasajes de Galdós y Clarín el monólogo como forma de autoanálisis del personaje.
 
El lenguaje: El lenguaje de los realistas gana en sencillez respecto a la etapa literaria anterior, esforzándose en depurar la retórica vacía, enfática y ornamental. La sintaxis oracional no es muy complicada. Los periodos oracionales son a veces extensos a causa de las enumeraciones motivadas por la minuciosidad descriptiva. En el léxico destaca la introducción de términos científicos, ya que los escritores siempre estuvieron muy atentos a la documentación para conseguir realismo hasta en los últimos detalles. Finalmente uno de los logros del Naturalismo es la viveza y frescura con que se reproduce el habla coloquial.









Fuente: http://lengua.laguia2000.com/literatura/literatura-naturalista

lunes, 3 de octubre de 2011

Émile Zola

(París, 1840 – 1902) Novelista francés, principal figura del naturalismo literario.
Hijo de Francesco Zola, ingeniero emigrante italiano, y de Émilie Aubert, proveniente de la pequeña burguesía francesa, pasó su infancia en Aix-en-Provence y estudió en el colegio Bourbon. Fue compañero de Paul Cézanne, con quien mantuvo una sólida amistad, y tomó contacto con la literatura romántica, especialmente con la narrativa de Victor Hugo y la poesía de A. De Musset, su favorito.

Al morir su padre en 1847, se trasladó a París junto a su madre y continuó sus estudios en el instituto Saint-Louis. Tras fracasar en su examen de graduación, en 1859 consiguió un empleo administrativo en una oficina de Aduanas y en 1862 empezó a trabajar para el departamento de publicidad de la editorial Hachette. Se interesó por la poesía y el teatro, y colaboró para periódicos como Le Figaro, Le Petit Journal y Le Salut Public.

 
Sus primeros libros publicados fueron un conjunto de relatos titulados Cuentos a Ninon (1864), y una novela autobiográfica con influencia del romanticismo, La confesión de Claude (1865). Escribió dos obras de teatro que no fueron representadas, La fea (1865) y Magdalena (1865), y en 1866 fue despedido de Hachette. Comenzó a trabajar como cronista literario y artístico en el periódico L’Événement, y publicó los trabajos de crítica pictórica Mis odios (1866) y Mi salón (1866), donde hizo una enérgica defensa de Manet, cuestionado en esa época por los sectores académicos.
 
A partir de ese momento se dedicó por completo a escribir, se alejó paulatinamente del romanticismo y sintió afinidad con el movimiento realista y el positivismo. Aplicó su experiencia periodística en Los misterios de Marsella (1867), una novela folletinesca. En 1867 obtuvo su primer éxito al publicar «Thérèse Raquin», primera de sus novelas que ilustra la teoría del naturalismo. Este término lo popularizó el propio Zola para designar la metódica aplicación del método científico a la literatura.
Con la novela Madeleine Férat (1868) fue consolidando su estilo, y la lectura de Introducción a la medicina experimental, de Claude Bernard, lo inspiró para concebir un conjunto de novelas escritas «con rigor científico», donde quería relatar la historia natural de varias generaciones de una familia bajo el Segundo Imperio.

Su obra ensayística comprende volúmenes teóricos sobre el naturalismo, como La novela experimental (1880), El naturalismo en el teatro (1881), Nuestros autores dramáticos (1881), Los novelistas naturalistas (1881), Documentos literarios (1881), y Una campaña (1882); así como textos de crítica y polémica, entre los que destacan Viaje de vuelta (1892), Nueva campaña (1897), y fundamentalmente ¡Yo acuso! (1898), un extenso artículo dirigido al Jefe de Estado francés y publicado originalmente en el periódico L’Aurore, donde defendió la inocencia del capitán de origen judío A. Dreyfus, acusado de alta traición a la patria por los militares antisemitas.

Thérèse Raquin», una novela espléndida, donde se describe con sobriedad pero sin recato alguno la degradación moral a que lleva una pasión enfermiza y asesina. Los dos personajes centrales son descritos a la perfección, un estudio psicológico donde cada palabra, cada frase y cada diálogo, trazan sin titubeos el retrato de un alma atormentada. Las pinceladas de este cuadro son soberbias pero extremadamente realistas, y los críticos de su época reaccionaron con una indignación tal, que obligaron a Zola a escribir su respuesta en un prefacio a la segunda edición explicando la intención y tesis que planteaba la novela.
 
La obra puede dividirse en tres partes.
 
Primera parte
Se cuentan los orígenes de Teresa, su infancia y la vida de campesina antes de su casamiento con su primo. La joven es presentada como un ser con muchas emociones retenidas, y que se deja llevar fácilmente por su tía, que le ordena cosas tales como dormir con su primo enfermo o compartir sus medicinas entre otras, su único consuelo es la época en la que va al campo, en la que se siente liberada, pero una vez se casa Camille decide mudarse con ella a París.
 
Segunda parte
Una vez conocida cierta libertad en París, se ve resignada a la oscuridad de una tienda, solo acompañada de unas personas que se reúnen allí periódicamente para cenar, allí aparece Laurent, siente una sensación de pasión tan fuerte que arriesga todo lo que tiene, sin importarle la posibilidad de un descubrimiento, y ante el crimen cometido, permanece impasible.
 
Tercera Parte
Se relatan los sentimientos de remordimiento de los asesinos tras cometer el crimen, la pasión de los amantes se convierte en rechazo, odio y miedo.

«La naturaleza y las circunstancias parecían haber hecho este hombre para esta mujer, y los ha impulsado hacia el otro. En conjunto, la mujer, nerviosa y disimulada, el hombre, lujurioso, viviendo como un animal, que hizo un par muy unido. Se complementan unos a otros, protegiéndose los unos de otros. Por la noche, en la mesa, a la pálida luzde la lámpara, se podía sentir la fuerza de la unión entre ellos, Laurent, con la cara sonriente y la máscara de silencio, impenetrable de Teresa.» – Therese Raquin pagina 43

 

Fuente: http://es.wikipedia.org/wiki/Th%C3%A9r%C3%A8se_Raquin
http://www.publispain.com/revista/biografia-de-emile-zola.htm 

sábado, 1 de octubre de 2011

Autores destacados del naturalismo

Theodore Dreiser – Una tragedia americana
 

Novela inspirada por una visión pesimista de la moderna América, en la cual, bajo su tradicional idealismo, refleja un profundo escepticismo y desencanto. El autor deja ver —como en la mayoría de sus obras— su actitud positivista y contraria a la religión católica. Más que un drama, esta obra es el análisis, minucioso y terrible, de un fenómeno considerado desde un punto de vista patológico: no obstante el sentido de piedad que pueda despertar, deja la impresión de una pesadilla fundamentalmente inhumana.

 
Argumento
 

El punto de arranque es la desgraciada reacción de Clive, hijo de predicadores espiritualistas errantes y miserables, ante una educación religiosa demasiado exclusiva y fanática. La miseria y la ineptitud ante la vida práctica, junto al deseo de las cosas materiales, impiden a los padres cuidar a sus hijos, que son llevados insensible y desastrosamente por el mal camino. Clive es de aspecto agradable, pero débil de carácter y casi patológicamente, esclavo de su vanidad y del complejo de inferioridad. Comienza a trabajar cuando es un adolescente en un hotel peculiar, donde la corrupción y el vicio se van apoderando de él. Obligado a huir por un fatal incidente, conoce a un tío suyo, rico industrial, que lo acoge y le proporciona un empleo. La revelación de unmundo nuevo, la riqueza y la elegancia, despierta en Clive la ambición de conseguir entrar en ese mundo prohibido. El amor de Roberta, compañera de trabajo en la fábrica, que le ha confortado en los momentos de soledad, llega a ser para él un obstáculo. En efecto, cuando está a punto de conquistar a una rica y caprichosa chica, Roberta le comunica que espera un hijo y le manifiesta insistentemente su deseo de casarse. Lentamente Clive va madurando la idea del delito y, casi inconscientemente, lo comete: Roberta se ahoga durante un paseo en barca. Aunque no hay indicios del homicidio, un implacable policía descubre el delito. Su madre, ya vieja, le acompaña durante todo el torturante proceso, le defiende y, finalmente, logra su arrepentimiento antes de ser ejecutado en la silla eléctrica.

 

«Cuando Clyde atravesó la primera puerta sintió diversas voces gritando: Adiós Clyde. Y Clyde todavía tuvo fuerzas para contestar:-Adiós a todos- Pero su voz era extraña y débil, hasta a él mismo le pareció, era distante, como si hubiera emergido de otro ser que caminaba a su lado, pero no era él mismo. Sus pies avanzaban mecánicamente. Y era consciente de aquel ruido que producían arrastrándose por el suelo mientras le empujaban hacia la puerta. Ya estaba allí, ahora abrían. Y allí estaba, finalmente, la silla que tan a menudo había percibido en sueños, la silla tan temida dónde ahora le obligaban a sentarse. Le dieron un empujón para entrar al interior, a través de la puerta que ya estaba abierta para recibirlo y que enseguida volverían a cerrar, y detrás quedaría toda la vida terrenal que había conocido. «

 

 
Honoré de BalzacEugenia Grandet
 

Balzac en su obra trata dos temas muy importantes, el primero es la avaricia, representada por el señor Grandet, en su obra se ve como el dinero puede dominar a las personas, a las leyes e incluso a los sentimientos, como el amor, de ahí se deriva el interés por el dinero; en la obra podemos apreciar, como dos familias (Loa Cruchot y los Des Grassis) se pelean la mano de Eugenia, pero sólo es por las riquezas que posee su padre, ellos sólo buscan el dinero, más no él amor. La otra temática que trata el autor es la del amor, representado en su forma más pura, por medio de Eugenia, la cual aunque vive en un mundo material, todo lo que hace y piensa esta dirigido por su espíritu; vemos como la bondad de Eugenia no tiene límites, que es capaz de regalar todo el oro que posee por amor y así termina la obra, Eugenia se convierte en una persona generosa, ayudando a los pobres y haciendo obras de beneficencia.

 
Argumento
 

Eugenia Grandet, hija de un rico vinatero de la provincia de Saumur, el señor Grandet, llamado comúnmente el Tío Grandet, cumple 23 años, los amigos de su padre, los Cruchot y los Des Grassis llegan a felicitarla llevándole grandes regalos, pero una inesperada visita, el Primo Charles Grandet, hijo del hermano del Tío Grandet, acaba de llegar de París, el visitante entrega una carta al Señor Grandet de parte de su padre, en esta el Tío Grandet se entera de que su hermano ha sufrido una terrible quiebra y por lo tanto se suicida, y además pide a Grandet que mande a su hijo a las Indias para que haga fortuna; la noticia de la muerte del señor Grandet de París no tarda en aparecer en los periódicos de la región, noticia que compromete mucho al señor Grandet, puesto que se ve obligado a salvar el honor de los Grandet; mientras él piensa que hacer con su sobrino, Eugenia, su madre y la gran Nanon, criada del señor Grandet, llamada así por su gran estatura y gran corpulencia, se encargan de atender al joven Charles, quién se siente confundido en aquella casa solitaria y hostil sin saber el porque de su visita, pero la señora Grandet, Nanon y sobretodo Eugenia tratan de satisfacer hasta el mínimo capricho del recién llegado a escondidas del Jefe de la Casa, todo transcurre normalmente hasta el día en que Charles se entera por medio del Tío Grandet, de la muerte de su padre, desde este día la vida de Charles se torna triste y melancólica, permaneciendo encerrado y solo en su habitación, mientras el señor Grandet sigue en sus negocios, y ahora interesado por salvar la liquidación de su hermano, este interés lo lleva a pedir la ayuda del Señor Des Grassis, el cual se encargará de viajar a París y recuperar este dinero. Eugenia aprovecha una salida de su padre a Angers, para entrar a la habitación de Charles en la que encuentra unas cartas escritas a sus amigos, Eugenia aprovechando que su primo esta dormido, se atreve a leer una de ellas, en la que se entera de la gran crisis por la cual esta pasando Charles, y contagiada por la tristeza de su primo Eugenia vuelve a su cuarto para traer todos los ahorros de su vida y dárselos a su primo, este a cambio le entrega un cofre de oro con las fotos de sus padres, este intercambio se convierte en un secreto para ambos; cuando el padre de Eugenia regresa los dos jóvenes ya se reúnen muy a menudo en el jardín, pasando momentos muy agradables para ambos, esta amistad le preocupa poco al Tío Grandet puesto que ya tiene listo todo para el viaje de su sobrino a las Indias, cuando llega por fin el día de la despedida, Charles y Eugenia se juran amor eterno en el jardín, y para asegurar más aún esta promesa, se dan el último beso de amor, el cual se convierte en algo inolvidable para Eugenia, que sigue acordándose de Charles todos los días cuando ve el precioso cofre que le dejó en prenda, este secreto que Eugenia había prometido nunca revelarlo, es descubierto por su madre, quien la sorprende en su cuarto mientras comparaba el parecido de Charles con su madre, el secreto permanece sin embargo entre las dos hasta el primero de enero, día de año nuevo, donde el padre de Eugenia, pide que le muestre su oro, la joven sin saber que hacer simplemente dice que ya no lo tiene, el padre dominado por la ira y por la avaricia pide una explicación por la pérdida del oro, sin ser satisfecho, razón por la cual se enoja con su hija, encerrándola en su cuarto a pan y agua, esta separación trae como consecuencias la enfermedad de la Señora Grandet, la cual va decayendo día tras día, hasta que finalmente seis meses después, el Tío Grandet se digna pagar un médico para el cuidado de su mujer y se reconcilia con su hija gracias a la influencia del notario Cruchot, su gran amigo, el cual le dice que si su mujer muere su hija quedará heredera de toda su fortuna, razón por la cual el Viejo avariento cede a sus más viles sentimientos y vuelve a encariñarse con su hija, la muerte de su mujer trae consigo grandes riquezas para la fortuna del avaro y una profunda tristeza en el corazón de Eugenia, en los siguientes seis años que transcurren, el Tío Grandet sigue aumentando sus riquezas y su relación con Eugenia es la mejor, el viejo pasa sus últimos días alado de su más preciado tesoro, el dinero y cuando muere deja una inmensa fortuna a su hija, diecisiete millones de francos, suma extraordinariamente grande en aquel tiempo, pero Eugenia que no conoce nada más bello que el amor espera con ansia noticias de su primo, quien tras el viaje por las Indias ha conocido nuevas gentes y esta pronto a casarse, sin saberlo Eugenia recibe una carta de este, en la que le cuenta su situación actual y pide que le mande aquel cofrecillo de oro, por el cual Eugenia estaba dispuesta a dar la vida, la noticia trae a Eugenia total resignación y al ver que los Cruchot estaban interesados en su fortuna logra convencer a uno de ellos, el presidente C. de Bonfons, quién se encarga de llevar aquel cofre de oro y una carta de Eugenia a Charles, en la cual le agradece a por su amistad y le dice que siempre será su fiel amiga; por otro lado La Gran Nanon consigue por fin alguien que la comprenda y se convierte en la señora de Cornoiller al casarse con este viejo servidor de la familia. Después de esto Eugenia y su nuevo esposo pasan los días en su casa que ahora se llena cada noche con muchas personas de la provincia, que se reúnen para jugar al Twist, pero el matrimonio de Eugenia dura corto tiempo, porque su esposo muere tres años después de su casamiento; sin nadie más que su fiel criada Nanon y Cornoiller, Eugenia pasa los días en su casa, ayudando a los pobres y haciendo obras de beneficencia, con una sola idea en su mente, ganarse el cielo.

 

«La señora Des Grassins, madre de un joven de veintitrés años, iba muy asiduamente a charlar con la señora Grandet, con la esperanza de poder casar a su querido Adolphe con la señorita Eugenia.
El banquero señor Des Grassins favorecía las maniobras de su esposa con constantes favores que hacía secretamente al viejo avaro, y siempre llegaba a tiempo al campo de batalla. Estos tres Des Grassins tenían asímismo sus secuaces, sus primos y sus aliados fieles.
Por el lado de los Cruchot, el clérigo, el Talleyrand de la familia, debidamente apoyado por su hermano el notario, disputaba vivamente el terreno a la banquera, y trataba de conquistar a la rica heredera para su sobrino el presidente.
Esta lucha velada entre los Cruchot y los Des Grassings, cuyo premio era la mano de Eugenia Grandet, era un tema que entusiasmaba a los diferentes estamentos de la sociedad de Saumur. ¿Con quién se casará la señorita Grandet, con el señor presidente, o con Adolphe Des Grassings?…….».

 

LITERATURA DEL REALISMO. MODO DE PRODUCCION CAPITALISTA

La literatura realista

Flaubert : la biografía

¿Genio creador o genio transcriptor?

El adulterio: Flaubert y Dostoievski

El personaje de Emma Bovary

El ensayo de Mario Vargas Llosa: La orgía perpetua. Flaubert y «Madame Bovary»

Literatura realista

A mediados del siglo XIX, el Romanticismo deja paso a un nuevo movimiento filosófico, cultural y artístico que ocupará lo que queda de siglo: el Realismo. Europa atraviesa una época caracterizada por los adelantos científicos y por los cambios y conflictos que algunos de ellos generan en los individuos y la sociedad. Los escritores intentarán describir esa realidad; de ahí el nombre que recibe esta corriente literaria.

De ese deseo de trasladar la realidad a los lectores lo más fielmente posible, derivan las principales características de la literatura realista:

o      La sustitución de los temas intimistas, legendarios y fantásticos típicos del movimiento anterior (Romanticismo) por la descripción del mundo real y exterior: lo actual, lo cotidiano, lo fácilmente observable. De ahí el auge que experimenta la novela, el género literario más apto para reproducir la realidad.

o      El intento de abarcar toda la realidad, tanto los ambientes familiares y sociales en que se mueven los personajes, como sus conflictos anímicos. Esto explica la minuciosidad con que se nos describe su pasado, el entorno en que se mueven, su evolución psicológica y sus ideas políticas, religiosas o morales. La literatura girará, pues, en torno a dos grandes ejes: lo social y lo psicológico.

o      La tendencia a la omnisciencia del narrador. Para poder ofrecernos lo que piensan y sienten sus personajes, sus secretos más escondidos, sus deseos más ocultos, el narrador ha de convertirse en un ser omnisciente y omnipresente, cualidades que comparte con el lector, quien con frecuencia sabe de los personajes más que ellos mismos.

o      El afán de objetividad del escritor, quien, para hacernos creíbles sus historias, intenta ocultarse evitando el punto de vista personal, tan propio del gusto romántico. Ello no impide tomar partido ante los graves problemas de su tiempo tales como los desequilibrios económicos, el paro, los conflictos sociales o la intolerancia religiosa entre otros.

Durante el último tercio del siglo, algunos escritores, influenciados por las corrientes filosóficas y científicas en boga, evolucionan hacia posturas más radicales. No se conforman con describir el comportamiento de sus personajes, sino que intentan demostrar que su carácter y su conducta están sujetos a leyes similares a las que rigen los fenómenos físicos. Este movimiento recibe el nombre de Naturalismo.

Entre los autores más destacados encontramos a Stendhal y a Balzac entre otros. Encontramos a Flaubert pero de él pero se hablará en otro apartado.

Stendhal

Henry Beyle que adoptó el pseudómino de Stendhal se aparta de los arrebatos del Romanticismo creando una obra fría y cerebral, basada en el análisis y la observación. Su capacidad para escudriñar el alma humana y su estilo claro y preciso, que él afirma haber aprendido en los códigos de leyes, lo convierten en el iniciador del movimiento realista y en un maestro de la novela psicológica. Con todo, sus héroes aún conservan el idealismo, la audacia y el individualismo de la época anterior.

En Rojo y negro relata las inútiles tentativas del hijo de un aldeano, cínico y ambicioso, por introducirse en la alta sociedad. Y en La cartuja de Parma presenta a otro aventurero, éste de familia aristocrática, quien, tras una serie de peripecias militares, políticas y amorosas, termina recluido en un monasterio.

Balzac

Honoré Balzac amaba, por encima de sus posibilidades, la riqueza, el lujo y los placeres, lo que le obligó a escribir constantemente para saldar sus deudas. Militó en los sectores políticos más reaccionarios, pero en su obra unas veces defiende el trono y el altar como los pilares básicos de la sociedad, y otras se identifica con el pueblo y critica a la burguesía y a la aristocracia.

Pensaba que el literato está obligado a ofrecer al lector un panorama completo de la sociedad («Quiero explicar mi siglo» como diría el autor) por lo que proyectó una obra de enormes dimensiones, La Comedia Humana, que contendría «todos los tipos y todas las posiciones sociales, sin que una sola situación en la vida, una fisonomía, un carácter de hombre o mujer, una manera de vivir, una profesión, un aspecto social, ni cualquier otra cosa referente a la infancia, a la vejez, a la edad madura, o a la política, a la justicia y a la guerra haya sido olvidada». De las cien novelas que debía comprender en La Comedia Humana, Balzac sólo logró terminar veinticuatro y varias series de narraciones breves: Escenas de la vida privada, Escenas de la vida parisiense, Escena de la vida política… Entre las novelas larga destacamos Eugenia Grandet, su obra maestra, y Papá Goriot, la historia de un anciano que ama intensamente a sus hijas, quienes le corresponden dejándolo morir abandonado.ç

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Gustave Flaubert: la biografía

 

El padre de Flaubert, Achille Flaubert era cirujano general. Su madre, era hija de un doctor del L’ Évêque de Pont y perteneció a una familia de distinguidos magistrados, típica de la gran burguesía provinciana.

Gustave Flaubert comenzó su carrera literaria en la escuela. Su primer trabajo fue publicado en Le Colibrí (1837). Cuando era aún muy joven conoció al filósofo Alfred Le Poittevin, con quien desarrolló una íntima amistad. La concepción pesimista del filósofo tuvo una fuerte influencia en él. No menos definitiva fue la impresión generada por el contacto con grandes cirujanos y el ambiente hospitalario, que vivió a través de la profesión de su padre.

De todas formas, la inteligencia del novelista se agudizó en un sentido más general. Concibió una aversión fuerte de ideas aceptadas que compiló un «diccionario» para su propio entretenimiento. Él y Le Poittevin inventaron un personaje imaginario y grotesco al que llamaron «Le Garçon» (el Muchacho) a quien le dieron voz en toda clase de comentarios que a ellos les parecían degradantes. Detestaba la burguesía porque consideraba que «tiene una manera baja de pensar.»

En noviembre de 1841, comenzó la carrera de Leyes en la Facultad de Ley de París. Sin embargo, a los 22 años y a consecuencia de una enfermedad nerviosa, abandonó los estudios y se consagró a la literatura.

Cuando su padre murió en enero de 1846, se retiró junto con su madre a su propiedad en Croisset, cerca de Rouen, en el Seine. Aunque todavía no pudiera saberlo, pasaría el resto de su vida allí.

Ese mismo año viajó a París y conoció a la poetisa Louise Colet que llegaría a ser su esposa, pero la relación no fue fácil. La forma obsesiva en que Flaubert protegía su independencia y los celos paranoicos de la mujer hicieron inevitable la separación, que se concretó en 1855.

En 1847, Flaubert había realizado una gira ambulante a lo largo de la costa de Bretaña con el escritor Maxime du Camp. Las páginas escritas por Flaubert en su periódico de esta gira «Alrededor de los Campos y Orillas» se publicó después de su muerte bajo ese título. Este libro contiene algunos rasgos de su mejor estilo.

Muchos trabajos de la madurez de Flaubert trataron asuntos acerca de los que había intentado escribir antes. A los 16 años, por ejemplo, completó el manuscrito de Memorias de un Hombre Enfadado donde revelaba su pasión devastadora por Elisa Schlésinger, una mujer 11 años mayor y esposa de un editor de música a quien Flaubert había conocido en 1836. Esta pasión sólo se reveló después de 35 años cuando Elisa había enviudado. Elisa fue el modelo que Flaubert utilizó para la creación de su personaje Marie Arnoux en su obra La educación sentimental. Antes de tomar forma definitiva, sin embargo, este trabajo sería vuelto a escribir en dos versiones

Paso a paso la obra fue extendiéndose en un inmenso panorama de Francia bajo la Monarquía de Julio la lectura indispensable, según Georges Sorel, para cualquier historiador que estudia el período que precedió el golpe de estado de 1851.

La composición de La Tentación de San Antonio proporciona otro ejemplo de esa tenacidad en la persecución de la perfección que hizo que Flaubert volviera constantemente sobre sus escritos sin estar nunca plenamente satisfecho con los resultados.

En 1839, comenzó a escribir Smarh, producto de la intrépida ambición de Flaubert de dar su Fausto a la literatura francesa. Trabajó sobre esa tarea entre 1846-49, la retomó en 1856, y luego en 1870. Finalmente publicó el libro como La Tentación de San Antonio en 1874. Las cuatro versiones muestran cómo las ideas del autor cambiaron con el curso del tiempo. La versión de 1849, influenciada por la filosofía de Spinoza, es nihilista en su conclusión. En la segunda versión la escritura es menos difusa, pero la sustancia es la misma. La tercera versión muestra un respeto hacia lo religioso, nunca antes presente. Flaubert había comenzado a creer que la ciencia y la religión, en lugar de chocar, son más bien dos polos de pensamiento. La versión publicada incorporó un catálogo de errores en el campo de lo Desconocido (así como su obra Bouvard y Pécuchet iba a contener una lista de errores en el campo de Ciencia).

Desde noviembre de 1849 hasta abril de 1851 Flaubert estuvo viajando por Egipto, Palestina, Siria, Turquía, Grecia, e Italia con Maxime du Camp. Antes de partir, sin embargo, él quiso terminar La Tentación de san Antonio y someterlo a revisión de su amigo el poeta Louis Bouilhet y de Maxime du Camp, para que ellos le brindaran su opinión sincera. Sus amigos lo condenaron sin piedad: -Arroja todo en el fuego y no mencionemos esto nunca más– le dijeron. Bouilhet fue más allá con su consejo: «Tu Musa debe conservarse en pan y agua o el lirismo la matará …»

Madame Bovary su obra maestra es un clásico basado en la historia común del adulterio pero de una profundidad y humanidad que pocas obras han podido alcanzar. Flaubert parece desprovisto de sentimientos hacia Emma Bovary: retrató desapasionadamente cada rasgo que pudiera iluminar la psicología de su personaje y su papel en el desarrollo lógico de su historia. Flaubert estaba señalando el principio de una nueva edad en la literatura.

Los méritos de La educación sentimental no pudieron apreciarse debido al complejo contexto social y Flaubert se vio muy defraudado. Dos de sus obras, El Sexo Débil y El Candidato, no alcanzaron tampoco el éxito esperado. Los últimos años de su vida, se vieron entristecidos por los problemas financieros. En 1875, el marido de su sobrina Caroline, Ernest Commanville, un importador de madera, se encontró con una pesada deuda y Flaubert sacrificó su propia fortuna para salvarlo de la quiebra.

Flaubert buscó el consuelo en su trabajo y en la amistad de George Sand, Ivan Turgenev, y los novelistas más jóvenes – Émile Zola, Alphonse Daudet, y, sobre todo, Maupassant.

El objetivo de Flaubert en el arte fue crear la belleza, y esta concepción chocó a menudo con los problemas morales y sociales que representaba retratar la realidad. Trabajó despacio y cuidadosamente, y, a medida que trabajaba, su idea acerca del arte se volvía más exacta.

Su ambición fue lograr un estilo «tan rítmico como el verso y tan preciso como el idioma de ciencia» (la carta a Louise Colet del 24 de abril de 1852).

Repetía a menudo que no existía cosa tal como un sinónimo y que un escritor tenía que rastrear «la única palabra correcta» para concretar su idea con precisión. Pero al mismo tiempo, siempre quiso dar una cadencia y una armonía de sílabas sonoras a su prosa, para que no sólo apelara a la inteligencia del lector sino también a su subconsciente, de la misma manera que lo hace la música, así tiene un efecto más penetrante que el sentido no más de las palabras a su valor de la cara. La composición para él era una angustia real.

Flaubert murió de repente de un golpe apopléjico. Dejó en su mesa una página inacabada y notas para el segundo volumen de una novela.

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¿Genio CONSTANTE o genio TRANSCRIPTOR?

La literatura francesa no conoce autores de la talla de Dante, Shakespeare o Dostoievski pero, sin embargo, debe reconocérsele su carácter de manantial donde desde los orígenes ha manado una corriente constante de autores y no se ha visto asolada por el general quebrantamiento que en ocasiones y por diversas causas ha asolado al resto de literaturas modernas. Esa abundancia de talentos se ha convertido en paliativo de la carencia de grandes figuras como las citadas anteriormente, haciendo de esta literatura la más completa de cuantas existen y la única en que se hallan representadas todas las épocas con una riqueza considerable tanto en cantidad como en calidad. Podría decirse, pues, que lo característico del genio literario francés está precisamente en la no-existencia de aquello que generalmente entendemos como genio y que se haya sustituido por una inteligencia mesurada y una increíble capacidad de constancia y de autocrítica.

Ejemplo claro de lo que acabamos de decir es Madame Bovary de Gustave Flaubert que a pesar de que según algunos autores es, en cierto modo, una de las mejores obras jamás escritas no es exactamente un modelo de inspiración improvisada. Recordemos lo que de ella se cuenta. Cuando Flaubert contaba con solo veintiocho años acabó su primera versión de La tentación de san Antonio. Para conocer la opinión de sus amigos, aquellos que siempre le aconsejaban, los reunió en su finca para leérsela. Estos amigos eran Louis Bouilhet y Máxime du Camp. Este último confiesa que la impresión de aquella lectura fue desastrosa y ambos le aconsejaron que desistiese de publicarla. Le incitaron, además, a que se dedicase a la literatura realista y a que se inspirase en un caso acaecido de veras.

Precisamente el año anterior la mujer del médico de una aldea cercana a Ruán se había suicidado envenenándose. Dicho médico estaba casado en segundas nupcias con esta mujer y lo había estado en primeras con una viuda fallecida años atrás. La existencia demostrada de estos personajes se convierte en argumento de aquellos que afirman que esta obra es una mera trascripción. No obstante, Flaubert, lejos de rendirse ante esto se defiende diciendo «Madame Bovary no tiene nada de verdadero. Es una historia totalmente inventada, en la que no he puesto nada de mis sentimientos ni de mi existencia». También dijo lo siguiente » Ningún modelo posó para mí. Madame Bovary es pura invención. Todos los personajes son totalmente imaginarios, y el mismísimo Yonville- l´Abbaye es un lugar que no existe en modo alguno, lo mismo que la Rieulle, etc. Lo que no impide que aquí, en Normandía, se haya querido descubrir en mi novela una multitud de alusiones. Si yo me hubiera servido de éstas, mis retratos tendrían menos parecido, porque hubiera tenido a la vista personalidades cuando lo que quise, por el contrario, fue reproducir tipos»

Estas afirmaciones tan tajantes deben ser entendidas como un intento de respetar la memoria de aquella mujer que había muerto envenenada pocos años atrás y no dañarla haciendo creer que ella y Madame Bovary eran la misma persona.

Pero volviendo al momento en que sus amigos dieron su opinión acerca de La tentación de san Antonio, Flaubert, se inclinó ante el parecer de estos desistiendo en su intento de publicar la novela y optó por irse de viaje. Lo hizo precisamente acompañado por Máxime du Camp. El viaje duró dos años desde el otoño de 1849 hasta el de 1851 y se centró por zonas como Egipto, Palestina, Grecia y Siria. A la vuelta del viaje, Flaubert llegó muy cambiado, la profunda decepción que le causaron estos países fueron un efecto decisivo en su trayectoria, tanto, que optó por el realismo de Madame Bovary. Una vez hubo regresado, volvió a convocar a sus amigos en su finca para comunicarles su decisión de seguir el consejo dado antes del viaje, corría el mes de octubre de 1851 y en diciembre de ese mismo año empezaba la composición de Madame Bovary. Obra que terminaría en abril de 1856, casi cuatro años y medio después.

Es esto precisamente lo que argumentan aquellos que defienden la obra de Flaubert y que dicen que Madame Bovary se debió a los consejos de los amigos de Flaubert el cual supo acatarlos con una humildad virtuosa de la que volverá a dar muestras en otras ocasiones como en su obra Salambô en la que como ya ocurría en La tentación de san Antonio Flaubert había escrito un mamotreto imposible de leer. En Salambô, su propósito no había sido en modo alguno «fijar un espejismo aplicando a la Antigüedad los procedimientos de la novela moderna y procurando ser sencillo» como él mismo diría después. Él había querido escribirla a la manera de un poema en prosa. Las frases constituían una sucesión de versículos ritmados. Con ese procedimiento se lograba una monotonía aplastante; además de utilizar los lances más rebuscados con los que trataba de dar la sensación de poema épico en prosa. Pero tras leerlo a sus amigos y ante los comentarios de estos, Flaubert optó por rehacer completamente la novela.

Tras haber visto las dos versiones sobre el origen de Madame Bovary cabe decir que con independencia de que sea inventada o mera trascripción, lo cierto es que se trata de una de las mejores novelas de todos los tiempos. A pesar de que sus fracasos en La tentación de san Antonio y Salambô parecen colocar a su autor lejos de aquellos grandes maestros que citamos en un principio lo cierto es que le dejan como fiel representante de la literatura francesa y de su genio trabajador y constante.

Si atendemos a lo realmente demostrado la obra no puede calificarse solo de realista o solo como trascripción, Flaubert se inspiró en la realidad pero supo darle su toque personal como el mago del estilo que era. Por eso sus personajes son y no son aquellos que realmente le sirvieron de modelo. Son, sí, en cierto modo aquellos habitantes de la aldea cercana a Ruán, pero por encima de todo, aquellos personajes, son Flaubert.

Este autor, entusiasta de Cervantes probablemente conocía la anécdota de Alfred de Vigny que afirma que al preguntar a Cervantes en el momento de la muerte a quien había querido retratar con el Quijote, este respondió «A mí» y es muy posible que fuese esto lo que le inspirase su famosa frase «Madame Bovary c´est moi» («Madame Bovary soy yo»).

Y es que este autor supo sumergirse tanto en su obra que llegó a identificarse con su protagonista. Él mismo insistía en lo maravilloso de deslizarse con otra personalidad por el universo que cada escritor crea al escribir una novela. Respecto al paseo de Emma y Rodolphe a caballo, afirmó «Hoy, por ejemplo, hombre y mujer a la vez, amante y amada, me paseé a caballo por un bosque, una tarde de otoño, bajo las hojas amarillas, y yo era los caballos, las hojas, el viento, las palabras que se decían y el sol rojo que les hacía entornar los párpados anegadosàde amor» tal era el grado de abstracción de Flaubert al ponerse frente a la hoja en blanco. Tanto y tanto llegó a sentirse parte de su obra que el propio Flaubert se atreve a afirmar que mientras redactaba el pasaje del suicidio pudo sentir los efectos del arsénico que ingería la adúltera. Esto está demostrado en una carta que el mismo escribió y en la que decía lo siguiente: «Sentía tan verdaderamente el gusto del arsénico en la boca, estaba tan envenenado yo mismo, que sufrí dos indigestiones una tras otra, dos indigestiones reales, con vómitos».

Todo lo afirmado por Flaubert no es debe extrañarnos pues en cuanto a su forma de trasladar los seres humanos como personajes a sus obras su procedimiento es mucho más sutil y complejo que el empleado al trasladar lugares. Y no es para menos, no se debe tratar igual a una persona que a un lugar. Si nos fijamos por ejemplo en el caso de Emma,, Flaubert parte de la mujer del médico de la aldea cercana a Ruán. La existencia de esta como ya dijimos está realmente demostrada, y de hecho su tumba se hallaba en el cementerio de la aldea en que vivió y actualmente existe un fragmento de la lápida. Se sabe de ella que era morena y que poseía un gusto refinado por el aderezo interior de su casa y también que gustaba de asistir a las fiestas normandas además de ser harto conocido su entusiasmo por las novelas. Pues bien todos estos detalles se encuentran en la novela con la única mutación de los nombres propios que Flaubert se tomó la molestia de cambiar. Pero la cosa no queda ahí, Flaubert no bebió solo de la fuente de inspiración de esta mujer, sino que se sirvió también de la mujer de un escultor amigo suyo a la que, en la bohemia del taller de su esposo, le gustaba rememorar pasadas andaduras y devaneos y referirlos a los amigos de este, entre los cuales, como ya hemos dicho, se hallaba Flaubert. Pero lejos de contentarse con esto, esta mujer se tomó la molestia de redactarlos. Al hallarse las memorias de esta entre los papeles de este autor se sospecha que fuese este quien le incitase a escribirlos.

Pues bien de la síntesis de estas dos mujeres, la mujer del médico con su gusto por las fiestas y las novelas y la mujer de su amigo, con sus devaneos y andaduras, de esta compleja mezcla, surgió Madame Bovary.

Por lo que no fue solo la realidad lo que Flaubert reflejó en su obra, es su complejidad a la hora de tratar los personajes lo que hace que no podamos calificar la obra como mera trascripción pero al servirse de la realidad, aún solo partiendo de ella, impide que podamos tildarla de pura inspiración.

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El adulterio: Flaubert y Dostoievski

Son muchos y muy variados los autores que a lo largo de la historia han tratado este tema en sus textos. Son textos tan variados que van desde el Antiguo Testamento ( con el rey David y Betsabé la esposa de Urías) a los Dramas de honor de Calderón de la Barca pasando por La leyenda del rey Arturo. Desde muy variadas perspectivas morales, han tocado el adulterio creaciones tan diversas como los Cuentos de Canterbury, de Geoffrey Chaucer; Otelo, de William Shakespeare; La letra escarlata, de Nathaniel Hawthorne; Divinas palabras, de Ramón María del Valle Inclán; La regenta, de Leopoldo Alas y Ureña; y Reflejos en un ojo dorado, de Carson McCullers. Se ha tratado, además, en la novela libertina francesa y sobretodo, en la novela del siglo XIX y es que esta última es la que trata el tema con mayor fruición.

Dentro de la novela del siglo XIX encontramos a Madame Bovary de Flaubert. Cuando esta novela apareció provocó un gran escándalo y su autor fue juzgado por «ofensas a la moral y a la religión». Quizás contribuyó a ello el hecho de que en la obra de Flaubert parezca entreverse el adulterio como una de las costumbres provincianas cuando lo que en realidad hace es encuadrar la obra con el conjunto de novelas de «segunda categoría» al teñirse de aspectos «costumbristas» o «regionales».

Hasta entonces siempre se había separado lo sagrado de lo profano. Esto es algo que se le achaca a Madame Bovary y es que en diversos pasajes de esta obra encontramos esta sacrílega mezcolanza. Uno de los más importante es el momento en que en la agonía, mientras el sacerdote recita los versos sagrados, un ciego entona desde la calle una canción profana que llega hasta Emma y excitándole le provoca una risa estridente y excéntrica al creer ver la horrible faz del miserable resurgiendo de las eternas tinieblas en su busca.

La lectura de la obra de Flaubert, inspiró a Dostievski su Eterno Marido publicado en 1970. Este hecho es bastante conocido, lo raro es que flaubertianos tan devotos como Maynial no hagan referencia a este influjo y sin embargo insistan en el que ejerció sobre autores franceses de escaso interés fuera de su patria.

Dostoievski supo dar al tema una mayor profundidad psíquica, ética y religiosa. El título en sí de la obra implica cierto sarcasmo que no se aviene con lo estrictamente religioso y es que hay piensa que la obra debería llamarse El eterno cornudo pero quien sabe si más por cierta decencia mal entendida le puso El eterno marido.

El tema de ambas obras es casi estrictamente el mismo: el adulterio de la esposa, descubierto por el marido después de la muerte de esta y las fatales consecuencias de todo ello. El adulterio va parejo de la expiación y es esta la idea que Dostoievski toma de la obra de Flaubert.

En esencia, el tema de Madame Bovary y el de El eterno marido son como ya hemos dicho casi el mismo sin embargo existen ciertas divergencias que evidencian las diferencias entre los autores, el escepticismo de Flaubert y el carácter ortodoxo de Dostoievski. En la obra del primero, los devaneos de Emma ocupan casi toda la novela, sin embargo, en El eterno marido se dan por supuestos y el relato empieza mucho después de la muerte de la adultera y es que lo que interesa a Dostoievski, no es el adulterio en sí, sino las horribles consecuencias, que en la obra de Flaubert solo forman el final.

En la obra de Dostoievski, quien expía el delito no es el que lo ha cometido porque la infidelidad se descubre una vez fallecida la adúltera, sino su marido y además de este la parte más inocente de la historia, la hija de ambos. Con ello no teme mira cara a cara uno de los «misterios de iniquidadà» más incomprensibles.

De ello ya se encuentra el embrión en Madame Bovary donde Charles, viudo inconsolable, descubre las pruebas del adulterio jamás sospechado. Su pesar es tal que muere por consunciónày tras esto la desdicha viene a recaer sobre la hija, la parte más inocente de la historia. En la obra de Dostoievski esta muere de miseria fisiológica después de una infancia tan corta como infernal. En Madame Bovary, sin embargo, la chica es recogida por un familiar que le hace trabajar para ganarse la vida.

Hemos dicho que en El eterno marido quienes expían el delito son el marido y la hija de la adúltera pero en Madame Bovary, la culpable expió antes su delito de un modo tal que hace palidecer lo que viene después. Flaubert se recrea en la narración del desastroso final de Emma desde el embargo hasta el suicidio y el posterior entierro. Tanto que utiliza para ello unas cuarenta páginas, mientras que la desdicha del marido, desde que descubre las cartas hasta el momento de su muerte abarca tan solo par de ellas. En lo que Flaubert resolvió en un par de páginas, Dostoievski, descubrió el núcleo del tema del adulterio: sus desastrosas consecuencias que recaen en las partes inocentes de la historia. Esto sobrecoge al lector y le hace sentir todas las repercusiones del adulterio por descargar la expiación del delito sobre la cabecita infantil, la parte más inocente de la obra.

Pero lo cierto es que no podemos acusar a la obra por «ofensas a la religión y a la moral» como lo hicieron sus coetáneos. Para los cristianos esta obra será lección de moral, pues si en algo peca Madame Bovary es en su severa moralidad, por el carácter implacable del castigo que no llega a atenuar una clara esperanza en otra vida donde Flaubert hace gala de su ya proverbial escepticismo.

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Emma Bovary, el personaje

Emma Bovary es un personaje complejo. Reunía egoísmo y avaricia pero a la vez, Emma es un ser ingenuo que despierta cierto sentimiento de lástima en el lector. Es un personaje inadaptado que podría equipararse a Don Quijote, el personaje de Cervantes, pues al igual que este, intenta hacer realidad su sueño en un mundo que no es el suyo. La lectura lo mismo que al hidalgo manchego le ocasiona la pérdida de la razón a Don Quijote y del sentido de la moral a ella.

Su madre murió cuando ella era joven y se refugió del mundo real dentro del convento y en la granja de su padre, lugares en los que se repartió su adolescencia. En núcleo cerrado del convento, ajena a todo lo que fuera de sus paredes sucedía, Emma se dejó eclipsar por los personajes de los libros que ha escondidas leía. Se creó la idea de que en el mundo exterior las cosas pasaban tal y como narraban las novelas que tanto le gustaban. Se imaginaba caballeros apuestos de modos gentiles y le gustaba pensar que algún día ella sería como una de aquellas damas que vivían amores apasionados.

Cuando Emma conoció a Charles accedió a casarse con él pues imaginaba que la vida junto a él sería como aquella que tantas y tantas veces había leído. Evidentemente el mundo no es como lo pintan en una novela y Emma acabó por darse cuenta de ello. Cuando descubrió que Charles no tenía nada en común con aquellos caballeros apuestos y que su vida junto a él nada tenía que ver con las de las protagonistas de las novelas, Emma se volvió una mujer desilusionada y apática. Culpaba a Charles de todo cuanto le pasaba y es que según ella todo se debía al carácter en exceso bonachón de su marido y del escaso interés de este por ascender a pesar de los intentos de este por tener a su amada esposa contenta nada era suficiente para contentar a Emma.

Aún sin comprender demasiado bien que era simplemente la mujer de un médico de provincia, Emma se afanaba por aparentar un estatus que no era el suyo y que difícilmente podía mantener. Se negaba a ver que ella nada tenía en común con aquellas damas de alta cuna a las que tanto admiraba y las que se esforzaba por imitar. Para ello adquiría gran cantidad de artículos de lujo en la tienda de Lheureux. Para sufragar los gastos se veía obligada a vender propiedades de su marido sin que este tuviese conocimiento de las gestiones comerciales de su mujer.

Pero Emma no solo engañaba a su marido en cuestiones económicas sino que también lo hacía en cuestiones sentimentales. En cierta ocasión le dijo a Charles que recibía clases de piano en la ciudad cuando en realidad utilizaba el dinero que su marido le daba para pagar esas clases en una habitación de hotel donde se reunía con su amante León. También compró una vez una pulsera de oro para su segundo amante mientras que no se menciona la compra de ningún tipo de regalo ni para su hija ni para su marido.

En estos amores furtivos, Emma, buscaba vivir y conocer las emociones relatadas en las novelas leídas en su juventud. En realidad, estos amores se acercaban bastante más que Charles al prototipo de hombre perfecto que Emma se había fijado en su mente y en su corazón. Eran más apuestos y más simpáticos, pero tenían los modos burdos que también veía en Charles y que tanto detestaba.

El entusiasmo de Emma por el estatus de vida de los ricos, se hizo más fuerte cuando asistió a la fiesta de La Vaubeyessard donde el lujo y el glamour le hacen recordar los ambientes descritos en sus novelas y le descubren que es posible crear un universo así en el mundo real y esto le lleva a incrementar el resentimiento hacia Charles y su conformidad que tanto repelía.

Pero no se puede culpar a Emma de nada de lo que hizo, ni de su afán por encuadrarse con las damas de alta cuna ni por sus infidelidades a Charles. No es culpa suya que en medio de aquella reclusión en el convento y los días en la granja de su padre las lecturas le hicieran crearse un universo propio, donde las mujeres vestían lujosos ropajes y los hombres eran auténticos caballeros. Si de algo se le puede acusar es de ingenuidad por creer que todo aquello que se narraba en las novelas podría llegar a ser cierto. Por creer también en las cartas de Rodolphe que le hicieron creer que realmente se irían juntos y que por fin viviría todas aquellas aventuras soñadas. Parecía además desconocer las reglas más básicas que rigen el mundo real y es que cuando compraba en la tienda de Lheureux lo hacía sin pensar que luego habría de pagarlo.

Emma, es en resumen, un personaje carente de voluntad que a merced de los acontecimientos o de los instintos, camina hacia el caos inexorablemente.

Con todo ello Flaubert pretende poner de manifiesto tanto las falsedades de la educación romántica, como la mediocre y insípida vida burguesa.

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La orgía perpetua. Flaubert y «Madame Bovary»

Insiste Vargas Llosa en la existencia de tres formas de realizar la crítica de una novela. La primera desde el punto de vista individual y subjetivo, por la impresión que la obra deja en el lector. Una segunda se refiere al punto de vista objetivo, con pretensiones científicas y en función de reglas universales, esto es, analizando lo que la historia es, las fuentes que utiliza, el lenguaje de que se sirve o el modo de tratar factores como el tiempo. La tercera y última se refiere más a la historia de la literatura que a la crítica en sí, es decir, en función de las novelas que se escribieron antes o después.

Pues bien, cada una de estas posiciones aplicadas a Madame Bovary constituye una parte del penetrante estudio de Vargas Llosa.

En la primera, Vargas Llosa, evoca su relación con la novela de Flaubert, en la que destaca su carácter de obra construida con orden riguroso, la descripción de la vida objetiva, concreta y de acción y sus características temáticas de rebeldía, melodrama y sexo.

En la segunda, tras analizar las condiciones que dieron lugar al nacimiento de esta obra analiza la transfiguración que lleva a cabo el autor para convertir en obra de arte la realidad, mediante el estilo, a partir del tema y de los personajes, así como del tiempo y del punto de vista del narrador.

Finalmente en la tercera, presenta a Madame Bovary como la primera novela moderna. Vargas Llosa con su complejidad y su profundidad ha analizado la «orgía perpetua» de Madame Bovary en toda su plenitud y hasta sus últimas consecuencias con una maestría con la que pocos o muy pocos autores podrían haberlo hecho

A continuación se refieren detalles que hacen alusión a aspectos formales de esta obra tales como las ediciones o las partes y sub-partes que lo componen entre otras. Si analizamos las partes que conforman el ensayo veremos que se corresponde con lo anteriormente citado.

 

EDICIONES:

Editorial Seix Barral, abril de 1975 (para América Latina) Editorial Taurus, 1975 (para España)

DEDICATORIA:

A CARLOS BARRAL, el penúltimo afrancesado

ÍNDICE DEL LIBRO:

Introducción………………………………………11

 

 UNO

Una pasión no correspondida…………………………………….15

      DOS

El hombre-pluma……………………………………………………..65

El elemento añadido…………………………………………………147

I. Alianzas y sustituciones……………………………….147

(a) Las cosas humanizadas…………………..150 (b) Los hombres cosificados…………………155 (c) Dinero y amor……………………………….159 (d) Madame Bovary, hombre………………..163 (e) Un mundo binario…………………………..170

II. Los cuatro tiempos de Madame Bovary…………194

(a) Un tiempo singular o específico………….196 (b) El tiempo circular o la repetición…………198 (c) El tiempo inmóvil o la eternidad plástica……………….204 (d) El tiempo imaginario…………………………………………..207

III. Las mudas del narrador…………………………………………….213

    1. Un narrador-personaje plural: el misterioso nous
    2. ……213 (b) El narrador omnisciente………………………………………216 (c) Narradores-personajes singulares………………………….226 (d) Las palabras en cursiva: el nivel retórico………………..229 (e) Las imágenes obstructoras……………………………………235 (f) El estilo indirecto libre………………………………………….237

      TRES

La primera novela moderna

I. II. III. IV. V. VI. El nacimiento del antihéroe La novela es forma El monólogo interior Las técnicas de la objetividad: la novela behavioristaàBertolt Brecht y Flaubert o la paradoja La novela como participación negativa en la vida

 

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LITERATURA ROMANTICA. CAPITALISMO

Características de la Literatura Romántica.

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El romanticismo es el movimiento en el campo literario con el fin derenovar la perspectiva de entender la vida, el mundo, la política, el arte y la cultura en general. Es originado en Alemania y en el Reino Unido a finales del siglo XVIII hasta mediados del siglo XIX, como una reacción revolucionaria contra el realismo de la Ilustración y el Clasicismo, tomando como prioridad los sentimientos. Se caracteriza por su entrega a la imaginación y la subjetividad de los pensamientos, y la expresión y su idealización de la naturaleza.

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Su característica principal es la ruptura en la tradición clasicista basada en un conjunto de reglas especificadas. El romanticismo es una manera de sentir y de concebir la naturaleza, la vida y el hombre que se presenta de una manera particular en cada país en donde se desarrolla.

El término «romanticismo» se rige dependiendo de la región en donde se desarrolle.

  • Inglaterra: con el significado de «irreal», empleándolo en el sentido de «emocionante» y «amoroso».

  • Alemania: como sinónimo de «medieval»

  • España: como términos romanesco, romancesco, románico, romántico.

El lema de este movimiento es la libertades en todos los aspectos, creando obras menos perfectas e irregulares y más íntimas, pero el Romanticismo en España fue muy breve y tardío, considerándose complejo y confuso, con grandes contradicciones que se basaban en la rebeldía e ideas revolucionarias hasta el retorno a la tradición católica-monárquica.

La poesía romántica es fundamentalmente lírica , es decir, se expresa de manera pesimista si intimidad amorosa y su sufrimiento en lo personal, aunque también se inspiran en hechos históricos, legendarios y exóticos, utilizando poesías antiguas (Neoclasicismo) o creación por el mismo poeta. Sus componentes son:

  • El YO, como propia identidad

  • El amor pasional

  • La búsqueda del absoluto

  • El sentimiento de rebeldía y libertad.

  • La evasión, huye de la realidad

  • La naturaleza, que es mostrada por sus modalidades y variaciones.

Entre poetas más resaltantes son:

  • José de Espronceda

 

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  • Gustavo A. Bécquer

 

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La Prosa.

Existe el deseo de la ficción literaria, contacto con aventuras y el misterio, pero la prosa romántica española se limita básicamente en la novela, la prosa científica, el periodismo y el cultivo intenso del costumbrismo.

 

Representantes más importante:

 

  • Gustavo A. Bécquer
  • Mariano J. Larra

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El Teatro.

El teatro Neoclásico no logró penetrar en los gustos de los españoles. A principios del siglo XIX se siguieron aplaudiendo a las obras del Siglo de Oro, donde estas obras despreciaban las reglas neoclásicas y combinaban el drama con la comedia. Entre los aspectos de las obras están:

  • Su estructura

  • Escenarios

  • Temática

  • Personajes

 

Entre los representantes más importante se encuentran:

 

  • José Zorrilla
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  • Ángel de Saavedra

 

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Romanticismo tardío Durante la mitad del siglo XIX los anteriores gustos por lo histórico y legendario pasan a un segundo plano y el principal interés se basa en la poesía más sentimental e intimista.

Los poetas más resaltantes de este período son:

  • Gustavo A. Bécquer

  • Augusto Ferrán

 

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  • Rosalía de Castro

 

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El romántico del siglo XIX era fundamentalmente un soñador y quería cambiar el mundo y se identificaba con las grandes causas humanas: libertad, patriotismo, justicia, etc.

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Presentación:

LITERATURA NEOCLASICA. CAPITALISMO

El Neoclasicismo

TeoríaActividades


Teoría:

El Siglo de las luces

Al siglo XVIII se le conoce como el Siglo de las luces porque el hombre rechaza todo aquello que le sea impuesto y sólo admite lo que le llega a través de la luz de su razón.

La razón es la norma con la que se valoran todas las manifestaciones humanas. Como consecuencia, aparece en Europa a principios de siglo un grupo de pensadores con un espíritu científico que toman la experimentación como método para adquirir el conocimiento sin temor a equivocarse. Este movimiento recibe el nombre de Ilustración.

Los ilustrados, para llegar a la verdad científica, comienzan a dudar de todo. La duda es el método para descubrir la verdad.

Las ideas de los ilustrados llegan a nuestro país a través de dos vías principales:

  • La difusión de libros franceses traducidos al castellano.
  • La aparición de los periódicos, donde los ilustrados exponen sus ideas y opiniones.

Situación de España.

Situación político-social Situación cultural
  • En España, el siglo XVIII comienza con el estreno de la casa real borbónica procedente de Francia.
    La nueva dinastía favorece e impulsa la penetración de la cultura de la Ilustración francesa y logra que nuestro país se incorpore a la política y cultura europeas.
    El Neoclasicismo, por lo tanto es de influencia francesa.
  • Pronto comienzan las reformas de los ilustrados. España, a principios del siglo XVIII estaba muy alejada de Europa. La sociedad estaba dividida en clases bastante rígidas (aristocracia, clero, labradores, criados, mendigos…); pero al mejorar las condiciones de vida, aumenta la población y aparece una nueva clase social: la burguesía.
  • Durante el reinado de Carlos III de realizan importantes reformas que consiguen mejorar el país.
  • La influencia cultural de la Ilustración francesa llega a través de la Corte Real; los monarcas se convierten en protectores de las Artes y de las Letras. Reflejo de esta preocupación cultural son las numerosas instituciones que, a imitación francesa, se crean en nuestro país durante el Siglo de las luces:

– Real Academia Españolahttp://www.rae.es Inaugurada por Felipe V en 1713. Su primer presidente fue el Marqués de Villena, don Juan Manuel Martínez Pacheco. La finalidad de la Academia es velar por la pureza del idioma; de ahí que su lema sea «Limpia, fija y da esplendor».
Actualmente los académicos se reúnen todos los jueves y entre las publicaciones más importantes se encuentran: la Gramática, la Ortografía y el Diccionario.

– Biblioteca Nacional. http://www.bne.es Fue fundada en 1712 por Felipe V, con libros de antiguas bibliotecas y colecciones que el rey trajo de Francia. La Biblioteca recibe un ejemplar de todos los libros que se publican en España.

– También se fundaron en este siglo la Real Academia de la Historia, el Jardín Botánico y elMuseo del Pradohttp://www.museoprado.mcu.es


La literatura en el siglo XVIII

Se considera a los escritores griegos y latinos como modelos a imitar. Es un retorno a los clásicos grecolatinos; ese es el origen de la palabra Neoclasicismo.

El Neoclasicismo da preferencia a la razón frente a los sentimientos, impone reglas a las que se deben ajustar las obras literarias. Como consecuencia de lo anterior se abandonó bastante la producción lírica.

Se rechaza lo imaginativo y lo fantástico, ya que no se escribía para entretener, sino para educar. La literatura neoclásica tiene un marcado carácter crítico, didáctico y moralizador.

Se pueden distinguir tres etapas o movimientos estéticos que se suceden en el siglo XVIII:

  • Reacción contra el Barroco. En la primera mitad del siglo se deja notar la influencia del Neoclasicismo francés. La producción literaria es escasa. Predomina el ensayo y la crítica. Como autores destacan Fray Benito Jerónimo Feijoo y Francisco Isla.
  • Triunfo del Neoclasicismo. Los escritores aceptan plenamente las normas neoclásicas y la literatura se somete al imperio de la razón. La producción literaria es escasa: apenas se escriben novelas, la poesía no ofrece ningún interés y muy pocas obras de teatro tuvieron éxito. Esta etapa ocupa desde mediados del siglo hasta las últimas décadas. Autores importantes de esta etapa fueron José Cadalso, Gaspar Melchor de Jovellanos, Juan Meléndez Valdés, Leandro Fernández de Moratín, Félix María Samaniego y Tomás de Iriarte.
  • Prerromanticismo. A finales de siglo comienza un movimiento de rechazo hacia las rígidas normas neoclásicas que traerá a principios del siglo XIX el Romanticismo. Nicasio Álvarez Cienfuegos, Manuel José Quintana y Alberto Lista son representantes de esta etapa.

La poesía neoclásica

Por considerarse de mal gusto expresar sentimientos, los poetas de este movimiento adoptan dos temas: el bucólico o pastoril y la fábula.


  • Poesía bucólica o pastoril

En este tipo de poesía se ensalza la naturaleza. Destaca Juan Meléndez Valdés.

  • Juan Meléndez Valdés

Nació en 1754 en Extremadura y cursó sus estudios en Salamanca, donde fue catedrático de Humanidades. Conoció a Cadalso y a Jovellanos quienes pusieron a su alcance las ideas ilustradas e hicieron de guía en su labor de escritor. Colaboró con el gobierno de José Bonaparte, por lo que se tuvo que exiliar a Francia tras la guerra de la Independencia. Murió en Francia en 1817.

Aunque no fue original en sus temas, sabe dar a sus versos un ritmo alegre y suelto. Destacó con obras de tema amoroso en las que ensalza la vida bucólica. Es el autor de una égloga (poema de tipo amoroso puesto en boca de pastores) titulada Batido, nombre que utilizó el poeta como seudónimo.

Rosana en los fuegos
A continuación puedes leer un fragmento de un romance de ambiente pastoril. Zagalas
y pastores salen a encender las hogueras de Pascua. Esto sirve al poeta para hacer un
juego de imágenes con el fuego de las hogueras y el fuego del amor.
Del sol llevaba la lumbre,
y la alegría del alba,
en sus celestiales ojos
la hermosísima Rosana,
una noche que a los fuegos
salió, la fiesta de Pascua,
para abrasar todo el valle
en mil amorosas ansias.
Por doquiera que camina
lleva tras sí la mañana,
y donde se vuelve rinde
la libertad de mil almas.
El céfiro la acaricia
y mansamente la halaga,
los Amores la rodean
y las Gracias la acompañan.
Y ella, así como en el valle
descuella la altiva palma
cuando sus verdes pimpollos
hasta las nubes levanta,
o cual vid de fruto llena
que con el olmo se abraza
y sus vástagos extiende
al arbitrio de las ramas;
así entre sus compañeras
el nevado cuello alza,
sobresaliendo entre todas
cual fresca rosa entre zarzas.

  • La fábula

En el siglo XVIII también se cultivó la fábula con el objetivo de ofrecer al lector consejos y enseñanzas morales puestas en boca de animales. Grandes fabulistas fueron Iriarte y Samaniego.

  • Tomás de Iriarte

Nació en La Orotava (Tenerife) en 1750 y murió en Madrid en 1791. Fue traductor de la primera secretaría de Estado y archivero del Supremo Consejo de la Guerra. Además de las fábulas literarias escribió muchas otras obras e hizo bastantes traducciones del francés. También fue compositor. Utiliza sus fábulas para dictar normas que logren un buen estilo literario.

El burro flautista
Es famosa su fábula titulada El burro flautista. Un burro se acerca a una flauta y, al
olerla, ésta suena, lo que hace pensar al animal que sabe tocarla; entonces el autor
saca la moraleja: sin reglas del arte, el que acierta en algo, acierta por casualidad.
Sin reglas de arte,
el que en algo acierta,
acierta por casualidad.
Esta fabulilla,
salga bien o mal,
me ha ocurrido ahora
por casualidad.
Cerca de unos prados
que hay en mi lugar,
pasaba un Borrico
por casualidad.
Una flauta en ellos
halló, que un zagal
se dejó olvidada
por casualidad.
Acercóse a olerla
el dicho animal,
y dio un resoplido
por casualidad.
En la flauta el aire
se hubo de colar,
y sonó la flauta
por casualidad.
«¡Oh! -dijo el Borrico-:
¡Qué bien sé tocar!
¡Y dirán que es mala
la música asnal!»
Sin reglas del arte,
borriquitos hay
que una vez aciertan
por casualidad.
  • Félix María Samaniego

Nació en Laguardia (Álava) en 1745 y murió en el mismo pueblo en 1801. Estudió en Valladolid y viajó por Francia, cuya influencia se advierte en la única obra por la que lo conocemos: las Fábulas morales, 157 fábulas distribuidas en 9 libros, escritas para los alumnos del seminario de Vergara.

Samaniego ridiculiza los defectos humanos en sus fábulas, imitando a los grandes fabulistas Fedro, Esopo y La Fontaine. Aunque las fábulas de Samaniego están escritas en verso, su carácter es prosaico, dados los asuntos que trata y su finalidad didáctica.

La Cigarra y la Hormiga
Una de las más famosas fábulas de Samaniego. Está escrita en heptasílabos. Pero vea
el lector a la cigarra como un personaje y no se juzgue al animal por estos hechos; pues
en el campo nunca pediría comida a la hormiga cuyos gustos alimenticios no comparte.
Cantando la Cigarra
pasó el verano entero,
sin hacer provisiones
allá para el invierno;
los fríos la obligaron
a guardar el silencio
y a acogerse al abrigo
de su estrecho aposento.
Viose desproveída
del preciso sustento:
sin mosca, sin gusano,
sin trigo y sin centeno.
Habitaba la hormiga
allí tabique en medio,
y con mil expresiones
de atención y respeto
le dijo: «Doña hormiga,
pues que en vuestro granero
sobran las provisiones
para vuestro alimento,
prestad alguna cosa
con que viva este invierno
esta triste Cigarra,
que, alegre en otro tiempo,
nunca conoció el daño,
nunca supo temerlo.
No dudéis en prestarme;
que fielmente prometo
pagaros con ganancias,
por el nombre que tengo.»
La codiciosa Hormiga
respondió con denuedo,
ocultando a la espalda
las llaves del granero:
«¡Yo prestar lo que gano
con un trabajo inmenso!
dime, pues, holgazana,
¿qué has hecho en el buen tiempo?»
«Yo, dijo la Cigarra,
a todo pasajero
cantaba alegremente,
sin cesar ni un momento.»
«¡Hola!, ¿conque cantabas
cuando yo andaba al remo?
Pues ahora que yo como,
baila, pese a tu cuerpo.»

La prosa en el Neoclasicismo

  • Reacción contra el Barroco

Durante la primera mitad del siglo se produce la reacción contra el Barroco y la toma de contacto con los movimientos neoclásicos franceses. La producción literaria es escasa y predomina la prosa en forma de crítica y ensayo.

  • Fray Benito Jerónimo Feijoo

El Padre Feijoo nació en Orense en 1676 y vivió casi siempre en Oviedo donde fue catedrático de Teología. Fue monje benedictino y se dedicó al estudio y a la enseñanza.

Su obra es fundamentalmente didáctica, ya que está encaminada a poner de manifiesto la verdad y atacar el error. De acuerdo con el espíritu ilustrado de la época, se propuso enseñar al pueblo y para ello criticó todas sus supersticiones, sus falsas ideas, sus costumbres rutinarias, etc. Intentó difundir en España las novedades de la cultura europea, que era en ese siglo muy superior a la nuestra.

Era progresista, amante de la razón y recomendaba calurosamente el estudio de las ciencias experimentales. Su tarea de divulgador de la ciencia y de la cultura contribuyó en gran medida a elevar el nivel cultural de la época.

Su estilo es claro, sobrio y preciso ya que es lo más apropiado para hacerse entender. Le importa más la precisión que la belleza.

Sus obras más representativas son:

  • Teatro Crítico Universal. Es una obra escrita en forma de ensayo; consta de ocho tomos donde el autor ataca duramente las supersticiones y falsas creencias marcando el límite entre lo natural y lo sobrenatural.
  • Cartas eruditas. Están escritas también en forma de ensayo; en ellas va exponiendo, a lo largo de cinco tomos, diversos problemas filosóficos, literarios, morales, etc.
Teatro Crítico Universal

Puedes leer a continuación un fragmento de uno de los ensayos que forman parte de su obra Teatro Crítico Universal. El tema del texto es la moda, asunto que interesó al autor y que interesa hoy a todo ser humano. En mayor o menor medida todos nos dejamos arrastrar por los dictámenes de la moda. Feijoo analiza el asunto y nos previene contra sus peligros. Observa la coherencia con la que el autor va exponiendo clara y ordenadamente sus ideas.

SOBRE LA MODA

Siempre la moda fue la moda. Quiero decir que siempre el mundo fue inclinado a los nuevos usos. Esto lo lleva de suyo la misma naturaleza. Todo lo viejo fastidia. El tiempo todo lo destruye. A lo que no quita la vida, quita la gracia… Piensan algunos que la variación de las modas depende de que sucesivamente se va refinando más el gusto, o la inventiva de los hombres cada día es más delicada. ¡Notable engaño! No agrada la moda nueva por mejor, sino porque se juzga que lo es, y por lo común se juzga mal. Los modos de vestir de hoy que llamamos nuevos, por la mayor parte son antiquísimos. Aquel linaje de anticuarios que llaman medallistas (estudio que en las naciones también es de la moda) han hallado en las medallas que las antiguas emperatrices tenían los mismos modos de vestidos y tocados que, como novísimos, usan las damas en estos tiempos… Hoy renace el uso mismo que veinte siglos ha expiró. Nuestros mayores le vieron decrépito y nosotros le logramos niño. Enterróle entonces el fastidio y hoy le resucita el antojo.

… La razón de la utilidad debe ser regla de la moda. No apruebo aquellos genios tan parciales de los pasados siglos que siempre se ponen de parte de las antiguallas. En todas las cosas el medio es el punto central de la razón. Tan contra ellas, y a caso más, es aborrecer todas las modas que abrazarlas todas. Recíbase la que fuere útil y honesta. Condénese la que no trajera otra recomendación que la novedad.


  • El imperio de la razón

Durante la segunda mitad del siglo XVIII, los escritores adoptan plenamente los modelos neoclásicos y la literatura se somete al imperio de la razón. Esta etapa ocupa desde mediados de siglo hasta las últimas décadas.

  • José Cadalso

Nació en Cádiz en 1741 donde realizó sus primeros estudios. Más tarde estudió en el Seminario de Nobles de Madrid. Desde muy joven tuvo oportunidad de viajar por diferentes países y ponerse en contacto con sus lenguas y sus culturas. A los 21 años regresó a España y comenzó su carrera militar llegando a alcanzar el grado de coronel del ejército español. Murió durante el bloqueo de Gibraltar en 1782.

Cadalso fue un hombre inteligente y culto, dotado de un fino espíritu crítico. Mantuvo amistad con todos los escritores importantes de su época y se interesó por todos los géneros literarios; aunque destacó más con sus obras en prosa: Los eruditos a la violeta, Noches lúgubres, Cartas Marruecas. Hoy se le recuerda fundamentalmente por sus Cartas Marruecas, obra de carácter ensayístico publicada varios años después de su muerte.

Cartas Marruecas

En este libro, el autor hace un análisis de las costumbres y carácter de los españoles. Para ello utiliza a un personaje marroquí llamado Gazel. Éste está de viaje por España y escribe una serie de cartas a su amigo y maestro Ben-Beley y en ellas le explica todo lo que observa en sus viajes.

La crítica que Cadalso hace de nuestras costumbres, tradiciones, instituciones, etc. nunca es dura ni extremada. Su postura es la de un pensador equilibrado, partidario de conservar lo mejor de nuestras tradiciones y de incorporar, al mismo tiempo, los progresos de otros países.

CARTA I De Gazel a Ben-Beley (Fragmento)

He logrado quedarme en España después del regreso de nuestro embajador, como lo deseaba muchos días ha, y te lo escribí varias veces durante su mansión en Madrid. Mi ánimo era viajar con utilidad, y este objeto no puede siempre lograrse en la comitiva de los grandes señores, particularmente asiáticos y africanos. Éstos no ven, digámoslo así, sino la superficie de la tierra por donde pasan; su fausto, los ningunos antecedentes por dónde indagar las cosas dignas de conocerse, el número de sus criados, la ignorancia de las lenguas, lo sospechosos que deben ser en los países por donde transiten y otros motivos, les impiden muchos medios que se ofrecen al particular que viaja con menos nota.

Me hallo vestido como estos cristianos, introducido en muchas de sus casas, poseyendo su idioma, y en amistad muy estrecha con un cristiano llamado Nuño Núñez, que es hombre que ha pasado por muchas vicisitudes de la suerte, carreras y métodos de vida. Se halla ahora separado del mundo, y, según su expresión, encarcelado dentro de sí mismo. En su compañía se me pasan con gusto las horas, porque procura instruirme en todo lo que me pregunto; y lo hace con tanta sinceridad, que algunas veces me dice: de esto no entiendo; y otras: de esto no quiero entender. Con estas proporciones hago ánimo de examinar no sólo la corte, sino todas las provincias de la península. Observaré las costumbres de este pueblo, notando las que son comunes con las de otros países de Europa, y las que le son particulares. Procuraré despojarme de muchas preocupaciones que tenemos los moros contra los cristianos, y particularmente contra los españoles. Notaré todo lo que me sorprenda, para tratar de ello con Nuño, y después participártelo con el juicio que sobre ello haya formado.


  • Gaspar Melchor de Jovellanos

Nació en Gijón en 1744, en el seno de una familia noble y culta. Desempeñó varios cargos públicos y desde ellos intentó resolver muchos de los problemas que tenía nuestro país en su época. Fue siempre un hombre prudente y equilibrado que deseaba encontrar el punto medio de todo e intentaba conseguir que España progresara en todos los aspectos.

Su obra es variada y didáctica. En ella denuncia la situación social y económica además de proponer las reformas necesarias para elevar el nivel material y moral de nuestro país. Lo más importante de su obra lo constituyen sus ensayos, por los cuales muchos lo consideran como el mejor prosista del siglo.

Algunas de sus obras son: Informe para el expediente de la Ley Agraria, Memoria para el arreglo de la policía de espectáculos y diversiones públicas, El castillo de Bellver, Pelayo, El delincuente honrado.

Inconvenientes de un viaje en coche.
Puedes leer un fragmento de una carta escrita por Jovellanos. Es una carta sobre viajes, en la que el autor aprovecha la ocasión para dar a conocer a los demás los problemas que afectan al país, con el fin de concienciar al pueblo de la necesidad de reformas. Su estilo es claro, sencillo y preciso en consonancia con la intención que le movía a escribir.
Caminar en coche es ciertamente una cosa muy regalada, pero no muy a propósito para conocer un país. Además de que la celeridad de las marchas ofrece los objetos a la vista en una sucesión demasiado rápida para poderlos examinar, el horizonte que se descubre es muy ceñido, muy indeterminado, variado de momento en momento, nunca bien expuesto a la observación analítica. Por otra parte, la conversación de cuatro personas embanastadas en un forlón, y jamás bien unidas en la idea de observar, ni en el modo y objetos de la observación; el ruido fastidioso de las campanillas y el continuo clamoreo de mayorales y zagales, con banderola, su capitana y su tordilla, son otras tantas distracciones que disipan el ánimo y no le permiten aplicar su atención a los objetos que se le presentan.Agregue a esto la naturaleza del país que acabamos de atravesar, compuesto de inmensas llanuras, de horizontes interminables, sin montes ni colinas, sin pueblos ni alquerías, sin árboles ni matas, sin un objeto siquiera que señale y divida sus espacios, y fije los aledaños de la observación, y verá que es incapaz de ser observador de carrera, y que se resiste sin arbitrio al estudio y meditación del caminante.

El teatro en el Neoclasicismo

Como toda obra neoclásica, el teatro se somete a las rígidas normas del clasicismo, por lo que adopta la regla de las tres unidades que Lope de Vega había roto en el Barroco. Desaparece de las obras de teatro todo tema imaginativo y fantástico, así como la mezcla de lo trágico y lo cómico. Surge un teatro exclusivamente didáctico.

Regla de las tres unidades
Acción Tiempo Lugar
Sólo habrá una acción en la obra. En el teatro anterior había acciones paralelas: la de los señores y la de los criados. La acción debe suceder, como máximo, a lo largo de un día. Toda la obra debe desarrollarse en el mismo sitio.
  • Leandro Fernández de Moratín

Nació en 1760 y era un hombre tímido, apacible, inteligente y culto. Sentía verdadera admiración por Francia y su cultura, lo que hizo que se pusiera de parte del rey José Bonaparte (hermano de Napoleón), llegando a desempeñar puestos de carácter cultural durante su reinado. Cuando fueron expulsados los franceses tuvo que irse exiliado. Vivió algún tiempo en Barcelona y Burdeos, y murió en París en 1828.

Toda su obra teatral esta realizada siguiendo las normas neoclásicas y ha convertido al autor en uno de los mejores y escasos dramaturgos de este siglo.

  • El sí de las niñas. En esta obra hace una dura crítica a las familias que obligan a sus hijas a casarse sin tener en cuenta sus sentimientos.
  • La comedia nueva o el café. Critica duramente a los poetas incultos e ignorantes que se atreven a escribir obras dramáticas.
El sí de las niñas
Es una obra con finalidad moral y didáctica cuyo argumento es el siguiente:D. Diego, un caballero de 59 años, va a casarse con Francisca, de 16 años, que acaba de salir de un convento de monjas donde estaba estudiando. El matrimonio ha sido preparado por la madre de la chica, Dña. Irene, sin contar con ella que ya está enamorada del joven Carlos, sobrino del caballero. Éste descubre el asunto y renuncia, con mucho sacrificio, a su matrimonio; puesto que ve más natural que la muchacha se case con un joven de su edad que con un viejo como él.

En el fragmento que va a continuación (Escena XI), D. Diego intenta convencer a Dña. Irene de que su hija está enamorada de otro. La madre no se lo cree e interpreta que lo que pasa es que al caballero ya no le interesa casarse con su hija.

DON DIEGO.- Muy bien. Siéntese usted… Y no hay que asustarse ni alborotarse (Siéntanse los dos) por nada de lo que yo diga; y cuenta, no nos abandone el juicio cuando más lo necesitamos… Su hija de usted está enamorada…DOÑA IRENE.- Pues ¿no lo he dicho ya mil veces? Sí, señor, que lo está; y bastaba que yo lo dijese para que…

DON DIEGO.- ¡Este vicio maldito de interrumpir a cada paso! Déjeme usted hablar.

DOÑA IRENE.- Bien, vamos, hable usted.

DON DIEGO.- Está enamorada; pero no está enamorada de mí.

DOÑA IRENE.- ¿Qué dice usted?

DON DIEGO.- Lo que usted oye.

DOÑA IRENE.- Pero ¿quién le ha contado a usted esos disparates?

DON DIEGO.- Nadie. Yo lo sé, yo lo he visto, nadie me lo ha contado, y cuando se lo digo a usted, bien seguro estoy de que es verdad… Vaya, ¿qué llanto es ése?

DOÑA IRENE.- (Llora) ¡Pobre de mí!

DON DIEGO.- ¿A qué viene eso?

DOÑA IRENE.- ¡Porque me ven sola y sin medios, y porque soy una pobre viuda, parece que todos me desprecian y se conjuran contra mí!

DON DIEGO.- Señora doña Irene…

DOÑA IRENE.- Al cabo de mis años y de mis achaques, verme tratada de esta manera, como un estropajo, como una puerca cenicienta, vale al decir… ¿Quién lo creyera de usted?… ¡Válgame Dios!… ¡Si vivieran mis tres difuntos!… Con el último difunto que me viviera, que tenía un genio como una serpiente…

DON DIEGO.- Mire usted, señora, que se me acaba ya la paciencia.

DOÑA IRENE.- Que lo mismo era replicarle, que se ponía hecho una furia del infierno, y un día de Corpus, yo no sé por qué friolera, hartó de mojicones a un comisario ordenador, y si no hubiera sido por dos padres del Carmen, que se pusieron de por medio, lo estrella contra un poste en los portales de Santa Cruz.

DON DIEGO.- Pero ¿es posible que no ha de entender usted a lo que voy a decirle?

DOÑA IRENE.- ¡Ay, no, señor; que bien lo sé, que no tengo pelo de tonta, no, señor!… Usted ya no quiere a la niña, y busca pretextos para zafarse de la obligación en que está… ¡Hija de mi alma y de mi corazón!

LITERATURA DEL BARROCO. MODO DE PRODUCCION FEUDAL

El Barroco. La poesía

TeoríaActividades


Teoría:

El Barroco

Se entiende por Barroco la evolución que sufre el arte renacentista, que culmina en el siglo XVII cuando las obras de arte se recargan con adornos superfluos y los temas se centran en el desengaño y el pesimismo.

Edad Media (S. V al XV) Renacimiento (S. XVI) Barroco (S. XVII)
Concepción de la vida
El hombre medieval concibe la vida como un valle de lágrimas. La muerte era considerada muchas veces como la liberación del hombre. El hombre renacentista concibe la vida como una etapa en la que hay que disfrutar antes de que llegue la muerte. Para el hombre del Barroco la vida se convierte en pesimismo y desengaño; el hombre ve el mundo como un conjunto de falsas ilusiones que acaba con la muerte.
Situación Política
Durante la Edad Media, el poder real estaba muy debilitado; necesitaban ayuda de los nobles para sus campañas militares. En el Renacimiento se fortalece el poder real. El dueño absoluto es el monarca, y los nobles se convierten en cortesanos. España, que había sido la potencia más importante del mundo, se hunde en un total fracaso y nuestro imperio termina con los últimos reyes de la casa de Austria.

La literatura barroca

El Barroco transcurre bajo los reinados de los tres últimos reyes de la casa de Austria: Felipe III, Felipe IV y Carlos II. Es una época de contrastes: decadencia política y social, por un lado y florecimiento artístico, por otro.

  • Temas

Se critica y satiriza sobre la ambición, el poder y el dinero. La brevedad de la vida, vista como un paso rápido hacia la muerte, es otro tema que atormenta a los hombres del Barroco.

  • Finalidad

El escritor del Barroco pretende impresionar los sentidos y la inteligencia con estímulos violentos, bien de orden sensorial, sentimental o intelectual. Para lograr lo anterior, recurre a un lenguaje ampuloso y retorcido, que dificulta muchas veces la comprensión.


Culteranismo y conceptismo

El Barroco es una época de contrastes y por esa razón ofrece dos tendencias literarias que se oponen; pero que persiguen el mismo fin: romper el equilibrio clásico.

El culteranismo es una corriente literaria que se basa principalmente en la forma de las palabras; mientras que el conceptismo se basa en el significado o concepto de la palabra.

CULTERANISMO CONCEPTISMO
Corriente literaria que cultiva la forma de las palabras dejando en un segundo plano su contenido y pretende crear un mundo de belleza, impresionando para ello los sentidos con los más variados estímulos de luz, color, sonido y con un lenguaje ampuloso y culto. Corriente literaria que profundiza en el sentido o concepto de las palabras; se puede definir como una agudeza mental que da preferencia a las ideas con el fin de impresionar la inteligencia o el deseo de decir mucho con pocas palabras.
Recursos Recursos
– Abuso de la metáfora con el fin de crear un mundo de belleza absoluta: Puertas de rubíes en lugar de labios.
– Uso frecuente de cultismos: palabras tomadas del latín o del griego: Argentar en lugar de platear; tórrido, umbroso, áureo…
– Abuso del hipérbaton. Consiste en alterar el orden de una oración, con lo que se llega a hacer difícil su comprensión: Un torrente es su barba impetuoso, en lugar de: su barba es un torrente impetuoso.
– Uso de palabras parónimas. Es decir, palabras de un sonido parecido y diferente significado; con lo que logran impresionar y llamar la atención sobre nuestros sentidos: Nubes-naves.
– Frecuentes metáforas, no con el fin de embellecer, como el culteranismo, sino para impresionar la inteligencia: Lumbre por pecado.
– Juegos de palabras: utilización de una misma palabra con significados diferentes: «Salió de la cárcel con tanta honra, que le acompañaron doscientos cardenales, sino que a ninguno llamaban eminencia». (Quevedo.)
– Estilo breve y conciso, que se logra mediante la elipsis o eliminación de palabras. Aplican el refrán: «Lo bueno, si breve, dos veces bueno».
– Antítesis de palabras, frases o ideas, con el fin de impresionar y agudizar la mente: «Mi negra capa, ya blanca por los pecados».
Máximo representante Máximo representante
Luis de Góngora y Argote Francisco de Quevedo y Villegas

Luis de Góngora y Argote

  • Vida

Nació en Córdoba en 1561. Su padre era juez de dicha ciudad y poseía una biblioteca bien dotada. Su madre pertenecía al igual que su padre a una ilustre familia cordobesa. Góngora era el apellido materno, que el poeta utilizaba en primer lugar tal vez porque le sonaba mejor. A los quince años fue a estudiar a Salamanca. Para beneficiarse de ciertas rentas eclesiásticas de un tío suyo llegó a ordenarse sacerdote cuando tenía cincuenta años. Residió algún tiempo en Madrid como capellán de Felipe III. Cuando murió el rey tuvo problemas económicos, se agravaron sus enfermedades y regresó a Córdoba, donde tuvo fuertes enfrentamientos con Quevedo, defendiendo sus ideas literarias. Murió en mayo de 1627

  • Obra

Su creación culterana más importante es la Fábula de Polifemo y Galatea, de tema mitológico, en la que narra el amor apasionado del gigante Polifemo hacia la ninfa Galatea. Otra obra en este sentido es Las soledades, poema en el que exalta la naturaleza y que quedó incompleto.

También escribió numerosos sonetos en los que predominan las sátiras a sus enemigos, entre ellos Lope y Quevedo. Escribió numerosas letrillas y romances a la manera tradicional, hermosos y fáciles de entender.

En el siglo XX se estudia a fondo su obra, y varios poetas como Alberti y Lorca reciben el influjo de la poesía de Góngora.

  • Estilo

Góngora utiliza un lenguaje poético muy elaborado, muy culto, muy selecto, lleno de metáforas originales. De todos modos, este carácter culto y difícil de su lengua poética no presenta la misma intensidad en toda su obra. Hay poemas como «Las Soledades», donde la dificultad es tal, que se necesitaría una verdadera traducción para entenderlos. Pero hay otros cuya lectura es mucho más asequible.


Francisco de Quevedo y Villegas

  • Vida

Nació en Madrid en septiembre de 1580 y murió en Villanueva de los Infantes (Ciudad Real) el 8 de septiembre de 1645. Estudió en Alcalá y Valladolid. Participó en la política de su tiempo, siendo consejero del duque de Osuna en Italia. Enemistado con el Conde Duque de Olivares, sufrió cuatro años de prisión en la cárcel de San Marcos de León. Tuvo dos grandes pasiones en su vida: la política y la literatura. Las dos le ocasionaron bastantes disgustos.

  • Obra

En prosa escribió: una novela picaresca, Vida del Buscón llamado Pablos; obras ascéticas, filosóficas y políticas, como La cuna y la sepultura, Política de Dios; obras satírico-morales, como Los sueños.

Sus poesías aparecieron publicadas después de su muerte en un libro titulado Parnaso español. La temática de sus poemas es muy variada: poesía satírica y burlesca, ataques a Góngora, poesía filosófica de dolor por la decadencia de España. Son muy conocidas: A una nariz, A una mujer gorda, A una dama coja, hermosa y remendada.

  • Estilo

La personalidad literaria de Quevedo resulta muy compleja: se unen en él el moralista riguroso, el satírico de afilado ingenio, el lírico de pureza exquisita y el escritor político de ideas claras. En toda su extensa y lograda obra demuestra su increíble dominio de la lengua.


Textos

Sonetos de Góngora

En «Canto a Córdoba», Góngora recuerda su ciudad natal, Córdoba, y escribe este soneto que envía a sus amigos. El soneto comienza con una exaltación de la ciudad y su entorno, y termina afirmando su constante recuerdo de ella.

En «A la mujer joven», el poeta toca el tema renacentista: aprovecha el tiempo, la vida que tienes; goza de la juventud mientras dura. El soneto se construye sobre la exaltación de la belleza de una mujer joven.

CANTO A CÓRDOBA

¡Oh excelso muro, oh torres coronadas
de honor, de majestad, de gallardía!
¡Oh gran río, gran rey de Andalucía,
de arenas nobles, ya que no doradas!
¡Oh fértil llano, oh sierras levantadas,
que privilegia el cielo y dora el día!
¡Oh siempre glorïosa patria mía,
tanto por plumas cuanto por espadas!
¡Si entre aquellas ruïnas y despojos
que enriquece Genil y Dauro baña
tu memoria no fue alimento mío,
nunca merezcan mis ausentes ojos
ver tu muro, tus torres y tu río,
tu llano y sierra, oh patria, oh flor de España!

A LA MUJER JOVEN

Mientras por competir con tu cabello,
oro bruñido, el Sol relumbra en vano,
mientras con menosprecio en medio el llano
mira tu blanca frente el lirio bello;
mientras a cada labio, por cogello,
siguen más ojos que al clavel temprano
y mientras triunfa con desdén lozano
de el luciente cristal tu gentil cuello
goza cuello, cabello, labio y frente
antes que lo que fue en tu edad dorada
oro, lirio, clavel, cristal luciente,
no sólo en plata, o víola troncada
se vuelva, mas tú y ello juntamente
en tierra, en humo, el polvo, en sombra, en nada.

Sonetos de Quevedo

En «Advertencia a un ministro», Quevedo advierte al poder, en la persona de un ministro, lo peligroso que es humillar al pueblo, pues es darle razones para rebelarse contra quien gobierna mal.

En «¡Cuán frágil es la vida!», desarrolla la idea de la brevedad de la vida; idea que tocan todos los poetas desde la Edad Media; pero que en la época barroca conduce a un sentimiento de desolación y desengaño.

ADVERTENCIA A UN MINISTRO

Tú, ya, ¡oh ministro!, afirma tu cuidado
en no injuriar al mísero y al fuerte;
cuando le quitas oro y plata, advierte
que les dejas el hierro acicalado.

Dejas espada y lanza al desdichado,
y poder y razón para vencerte;
no sabe pueblo ayuno temer muerte;
armas quedan al pueblo despojado.

Quien ve su perdición cierta, aborrece,
más que su perdición, la causa della;
y ésta, no aquélla, es más quien le enfurece.

Arma su desnudez y su querella
con desesperación, cuando le ofrece
venganza del rigor quien le atropella.

¡CUÁN FRÁGIL ES LA VIDA!

¡Cómo de entre mis manos te resbalas!
¡Oh, cómo te deslizas, edad mía!
¡Qué mudos pasos traes, oh muerte fría,
pues con callado pie todo lo igualas!

Feroz, de tierra el débil muro escalas,
en quien lozana juventud se fía;
mas ya mi corazón del postrer día
atiende el vuelo, sin mirar las alas.

¡Oh condición mortal! ¡Oh dura suerte!
¡Que no puedo querer vivir mañana
sin la pensión de procurar mi muerte!

Cualquier instante de la vida humana
es nueva ejecución, con que me advierte
cuán frágil es, cuán mísera, cuán vana.


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LITERATURA DEL RENACIMIENTO. MODO DE PRODUCCION CAPITALISTA

Literatura renacentista

  Si en la Edad Media se había sentido un gran respeto por la cultura desaparecida, ese respeto se hace devoción en el Humanismo; y no sólo por la cultura y las artes, también por las costumbres, los modos de vivir y de pensar de los clásicos.

La inteligencia humana no es algo tan pequeño que nada vale sin la Revelación, como se había pensado en la época medieval; al contrario, es una fuerza poderosa que puede descubrir y descifrar los enigmas y misterios que rodean al hombre. Tampoco el cuerpo es una fuente de pecado, sino una fuente de placer que hace agradable la vida.

Italia se adelantó dos siglos al resto de Europa en el redescubrimiento del mundo antiguo, cuya cultura y pensamiento renacían ( re-nacían, re-nacer, re- nacimiento) y se convertían en modelos de vida, pensamiento, arte y literatura. La belleza y riqueza del Renacimiento italiano deslumbraron a los franceses y españoles que luchaban en Italia.

Al caer Constantinopla en poder de los turcos, los eruditos griegos salidos de la ciudad se instalan en las cortes de los príncipes italianos. Allí traducen a los grandes autores y filósofos griegos, cuyas obras influyen en los ideales de la época. La invención de la imprenta favorece extraordinariamente el abaratamiento y, por tanto, la difusión de los libros. Se multiplican las traducciones, los diccionarios; surgen las primeras gramáticas de los idiomas nacionales.

Los primeros humanistas piensan injustamente que la Edad Media fue sólo una época de bárbaros, que las lenguas romances son pobres e incapaces de expresar los matices del latín. Esto explica por qué, durante mucho tiempo, los escritores cultos consideran sus obras en romance de poca importancia, y por eso las obras que ellos estiman más importantes las escriben en latín. Garcilaso de la Vega se lamenta de lo poco que se escribe en castellano: «Yo no sé qué desventura ha sido siempre la nuestra que apenas ha nadie escrito en nuestra lengua…»

La poesía lírica

  Los grandes poetas italianos empezaron a ser conocidos, admirados e imitados por toda Europa. España fue el país que más rápidamente se incorporó a las novedades italianas y a esa labor de traducción de los grandes autores latinos.
  Si los poetas del siglo XV habían imitado sobre todo a Dante, en el siglo XVI el modelo es la poesía delicada y sentimental de Petrarca.
  Los temas predilectos van a ser el amor, la Naturaleza y los mitos de la Antigüedad cláscica.
  El amor se concibe a la manera de Petrarca, es decir, un amor espiritualizado, que considera la belleza como un reflejo de la divinidad.

La poesía ascética y mística

  Durante el reinado de Felipe II surge con fuerza extraordinaria en la historia de las letras españolas la literatura ascético-mística.
   La ascética es el camino que emprende el alma en busca de la perfección. Está en relación con la voluntad humana, porque es el alma quien decide mortificarse, orar y renunciar al apego por las cosas terrenas.
  La mística es el conocimiento experimental de la presencia divina, en que el alma tiene, como una realidad, un sentimiento de contacto con Dios.
  La mística surgió en Europa durante la Edad Media. España, sin embargo, no había tenido escritores místicos en esa época – excepto Raimundo Lulio -. La mística española aparece, pues, con un enorme retraso; pero con una perfección e intensidad incomparables.
   Con Fray Luis de León, la poesía religiosa – no la mística- alcanza el equilibrio entre el Humanismo y el espíritu religioso de la Contrarreforma.
  La literatura ascética y mística tendrá  sus más altos exponentes en San Juan de la Cruz y Santa Teresa de Jesús.
  Pero es preciso señalar que en estos dos santos – y en la mística española en general- la experiencia de la divinidad no está vinculada a una actitud pasiva y contemplativa. Todo lo contrario, tanto su literatura como su vida tienen un carácter moralizador y activo.
  Los escritores ascético-místicos españoles consideraron la caridad activa como el camino que mejor conducía a Dios.

Poesía épica

 Las verdaderas aventuras de los conquistadores de España y Portugal ofrecían hechos reales tan extraordinarios que no era necesario recurrir a la fantasía. «La Araucana» de Ercilla y «Os Lusiadas», del portugués Camoens, son los mejores poemas épicos cultos de España y Portugal, respectivamente.

La novela

La novela sentimental

 Uno de los grandes autores italianos, Boccaccio, inició un nuevo tipo de relato con su obra «Fiammetta», que sirvió de modelo a otras narraciones españolas del siglo XV. El tema central de estas obras es la pasión amorosa y las sensaciones que produce en el enamorado.

La novela pastoril

  Las églogas de Virgilio, donde los pastores hablaban un lenguaje culto y refinado, sirvieron de modelo a Petrarca para escribir una obra sobre el mismo tema. Esta corriente literaria que idealiza la Naturaleza y la vida de los pastores, alcanzó un gran éxito en el siglo XVI en forma de novela.
  La primera novela pastoril es «La Arcadia», de Sannazzaro, que sirvió de modelo para el género.
  En España se escribieron muchas novelas de este género como «La Galatea»,  de Cervantes.

La novela picaresca

  En el siglo XVI se inicia en España un nuevo género novelesco que no existía anteriormente: la novela picaresca.
  El personaje central de estas novelas es un pícaro. Este personaje viene a ser una especie de héroe al revés. Los altos ideales y sentimientos del héroe caballeresco le son desconocidos; ni el honor ni el amor le inquietan. Vive en la miseria; es desvergonzado, plebeyo y con pocos escrúpulos. Sus orígenes son ínfimos y, con frecuencia, deshonrosos; pero no trata de ocultarlo, lo dice con toda tranquilidad. Es la primera vez que un personaje de estas características se asoma a un relato para protagonizarlo.
  Huye del trabajo fijo, prefiere mendigar o recurrir a ingeniosas tretas antes de someterse a la tiranía de un trabajo disciplinado.
  Sabe que está sólo, que únicamente cuenta con su habilidad y su ingenio para salir de los apuros.
  Sabe mirar las cosas fríamente, sin hacerse ilusiones. No es ambicioso, está convencido de que nada vale el trabajo que cuesta conseguirlo.
 No reniega de la fe, pero no se rige por reglas morales ni religiosas.
  Si las novelas caballerescas transcurren en una época indeterminada y en países imaginarios, la novela picaresca tiene sus raíces en un tiempo y un lugar determinados: la España de los siglos XVI y XVII.
  La aparición del pícaro en la literatura está relacionada con un sector de la población española en esa época. El largo esfuerzo realizado por España para sostener las guerras en Europa y las conquistas en el Nuevo Mundo habían empezado a arrojar sus resultados penosos: soldados que volvían de las campañas empobrecidos e inválidos, aventureros, campesinos que abandonaban sus tierras…
  A estos hombres les resultaba muy difícil dedicarse a un trabajo diario y una vida ordenada. Eran más propensos a holgazanear; sentían, además, un menosprecio tradicional hacia los trabajos manuales que habían realizado los judíos y  los moriscos durante siglos.
  Acostumbrados a las aventuras y peligros por tierras extranjeras, la pequeña aventura diaria de buscarse qué comer no debía preocuparles demasiado; especialmente, si eso les permitía disfrutar de su ocio. No tenían bienes ni comodidades, pero podían desplazarse con libertad de un lado a otro sin que  les estorbara el peso de su equipaje.
  La primera novela picaresca es el «Lazarillo de Tormes», de autor anónimo, publicada en 1554.

La novela de caballerías

  En pleno renacimiento, España pondrá de moda en Europa un género típicamente medieval, la novela de caballerías.
  Estas novelas de pura imaginación, sin ninguna relación con la verdad histórica, alcanzaron una gran difusión entre todos los públicos europeos.
  Se llegó a tener tal afición en España por los libros de caballerías que fueron muchos los escritores severos y moralistas que los atacaron y desaconsejaron su lectura. Finalmente, fue Cervantes, con su «Quijote», el que logró  «poner en aborrecimiento de los hombres las fingidas y disparatadas historias de los libros de caballerías».

  La primera novela moderna

  Durante los siglos XV Y XVI se escribieron muchas novelas de muy diversas clases; sin embargo, se dice que «Don Quijote» es la primera novela moderna porque tomó elementos de todas las anteriores y creó una nueva clase de novela, que es el origen de la novela moderna.
 En la novela de caballerías se relataban las hazañas de los caballeros andantes, hombres valerosos que salían a buscar aventuras guiados por un ideal y por el amor a su dama. Todas las aventuras eran fantásticas y sucedían en países extraños, muchas veces inexistentes; y en épocas desconocidas. El héroe se enfrentaba solo a todo un ejército, mataba dragones y animales imaginarios, luchaba contra magos y brujas… Algo así como  un superhombre que fuera totalmente invulnerable.
 Este poderoso caballero no sufría ningún cambio en su interior, empezaba siendo heroico y terminaba de la misma manera, sin tener ningún momento de vacilación; era un héroe que siempre tenía que serlo: un personaje fijo, inalterable a lo largo del relato.
  Cervantes utilizó el procedimiento de la parodia o imitación humorística de este tipo de novelas. Don Quijote es un caballero andante que vive en el mundo real y no en el imaginario de los caballeros. No hay animales extraños, ni magos ni brujas en las aventuras de don Quijote, hay gente común de la España de la época. ¿Dónde están los magos, los encantamientos, las damas prisioneras y los castillos? Sólo en la imaginación de don Quijote.  El último caballero andante ya no recorre el mundo que él imagina, sino el siglo y la España de Cervantes. Ya había un precedente importante de un tiempo y un lugar reales en género novelesco: el héroe de la novela picaresca, ese héroe que sabe más del hambre que de las princesas encantadas.
También el tema pastoril aparece en la novela de Cervantes, incluso don Quijote pensará en hacerse pastor y componer versos a Dulcinea.
  «El Ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha» inaugura así una nueva clase de novela en la que se puede hablar de todo, porque don Quijote y Sancho pueden encontrar de todo, también, en su búsqueda de aventuras. Y esto no ocurría en los otros géneros novelescos, porque el ambiente refinado y culto de las novelas pastoriles, por ejemplo, exigía hablar de las penas amorosas que sentían siempre los pastores. Otro tanto sucedía en los libros de caballerías que obligatoriamente tenían que acumular azañas asombrosas. Cervantes, en cambio, creó un tipo de novela en donde se podía hablar de muchas cosas a la vez, con momentos cómicos y trágicos, mezclar la burla y la reflexión, las fantasías de don Quijote con el sentido realista de Sancho.
  Además, los diálogos del caballero y el escudero permiten al lector ser testigo no solamente de sus hazañas, sino también de sus momentos de duda, de desánimo, asistir a sus disputas, a los engaños de Sancho… De esta forma, el lector no se siente lejos de los personajes, porque los ve comportarse, emocionarse y entristecerse, tal como sucede a los hombres verdaderos de todas las épocas. A lo largo de la novela se llega a conocer tanto a los protagonistas que uno se pregunta si de verdad no han existido.

El teatro

  En el siglo XV se observa que el teatro va dejando de ser religioso y moralizante para convertirse en teatro de «salon» que se representa para la nobleza.
  Durante el siglo XVI, el teatro abandona los salones para acercarse al pueblo. El teatro se convierte en una empresa económica.
  Se tienen que escribir obras que agreden a la gente y el autor de ser anónimo.
  Surgen o resurgen la comedia y tragedia a modo clásico. Se representa la vida diaria en la que el público pueda reconocerse, se resucitan las canciones populares y la forma teatral se hace más ordinaria.
  Hacia finales del siglo XVI, coincidiendo con el reinado de Isabel I, el teatro inglés ya está perfectamente caracterizado. Es un teatro que nace y se desarrolla casi exclusivamente en Londres, donde se escriben y se representan obras.
  A este teatro acudían por igual el hombre ilustrado y el aficionado inculto. El público, heterogéneo y muy numeroso, buscaba en la escena ante todo acción, movimiento, pasiones fuertes, emociones violentas.
  Los autores poseían una formación desigual, y si bien algunos, como Shakespeare, conocían las obras de la Antigüedad clásica, la mayoría de los dramaturgos eran comediantes de oficio, preocupados sólo por los dramaturgos eran comediantes de oficio, preocupados sólo por los valores escénicos. Era muy frecuente hallar en una sola persona al autor y al actor.
  El drama inglés del Renacimiento no respeta ninguna clase de normas: mezcla lo trágico y lo cómico, lo solemne con lo grotesco y disparatado, se alterna la prosa con el verso (canciones y rimas populares). En este sentido es un teatro muy libre. La acción, que suele ser compleja, se desarrolla con gran rapidez y a veces abarca varios años. El número de personajes es considerable. Sin apenas decoración, la acción salta de un lugar a otro, de un país a otro, del día a la noche, de una época a otra rápidamente. No existen telones, ni candilejas, ni patio de butacas; los actores representaban moviéndose, desplazándose libremente entre el auditorio.
  Un teatro de estas características exigía una gran participación imaginativa del espectador. La forma de participación por excelencia se alcanza con el soliloquio, mediante el cual un personaje revela sus pensamientos y sentimientos al espectador. Los argumentos están sacados de la vida diaria, de la leyenda, de la historia de los más diversos países y épocas. No están especialmente interesados los autores ingleses en la originalidad de los asuntos. Shakespeare acude al pasado de Inglaterra, a las leyendas italianas medievales o a la Atenas clásica en busca de argumentos para sus dramas. Las muertes, las batallas, las revoluciones, las traiciones, el amor, las pasiones, lo fantasmagórico, lo trágico, lo cómico, recorren el drama inglés del Renacimiento; un estilo que es ejemplo extraordinario de teatro rico, libre, lleno de vida, en el que tienen cabida todo tipo de problemas y situaciones. Este modo de representar, sobrio y aparentemente primitivo, nos sorprende hoy por su gran actualidad, a pesar del tiempo transcurrido.

La historia

 Tienen extraordinaria importancia las Crónicas de Indias.
  Muchas crónicas fueron escritas sin afanes literarios ni historiográficos. Simplemente se pretendía explicar al rey cómo sucedieron los hechos, las resistencias que encontraron los conquistadores, las batallas que sostuvieron y el porqué de las decisiones que los jefes habían tomado.
  Estas crónicas pertenecen – por lo general – a autores poco letrados, que utilizan un estilo directo, simple, medieval todavía; pero que poseen toda la fuerza de una experiencia y unas luchas que fueron vividas por quienes las escribieron.
  El soldado que luchaba y narraba los acontecimientos, escribía, en general, de un modo espontáneo. Pero los historiadores oficiales, que sin haber participado en las luchas escribían sobre la conquista, tenían un tono bien distinto: les falta la fuerza que transmite el que cuenta lo que ha vivido. Influyen, además, sobre los cronistas cultos, razones políticas o históricas -cuando no intereses propios- que les llevan a razonar sobre el significado e importancia de la conquista. Su estilo acusa la influencia de los clásicos: abundan los latinismos, los discursos solemnes que ponen en boca de los héroes…

LITERATURA MEDIEVAL. FEUDALISMO

La literatura medieval

I. Características generales de la Edad Media

La Edad Media transcurre durante una larga etapa histórica que abarca desde la caída del Imperio Romano (en el año 476) y la conquista de Constantinopla, en el siglo XV. En España ese final se suele situar en el descubrimiento de América y la expulsión de los judíos (1492). La Edad Media se divide, a su vez, en varios períodos denominados Primera Edad Media (476-siglo VIII); Alta Edad Media (siglos VIII-XII) y Baja Edad Media (siglos XIII-XV).

En la península ibérica, esta época estará marcada, fundamentalmente, por laReconquista y en toda Europa por las Cruzadas, las expediciones cristianas enviadas para rescatar los santos lugares. Este hecho y la estructuración de la sociedad se verán reflejados en la literatura medieval. Además, la convivencia detres culturas (cristiana, árabe y judía) creará una rica cultura que, igualmente, caracterizará y aportará originalidad a nuestra literatura. Asimismo relevante en la península fue el fenómeno de la peregrinación a Santiago de Compostela, lo que supuso una vía importante de contacto con Europa.

La sociedad medieval en los reinos cristianos de la península se caracterizó por una clara jerarquía de estamentos. La sociedad, a modo de pirámide en cuya cúspide se encontraba el rey como máxima autoridad, representante de los poderes terrenales y divinos, se dividía en los siguientes estamentos:

  • La nobleza: Dedicada a las tareas de la guerra y la caza, estaba obligada a servir al rey, mediante el juramento del vasallaje. Poseían grandes extensiones de terreno y riqueza.

  • El clero: Su labor era, fundamentalmente, adoctrinar a las gentes y conservar y transmitir la cultura. Los monasterios fue el lugar propicio para la conservación de dicha cultura y de donde surgirían las primeras universidades.

  • El pueblo llano: Constituía la mayor parte de la población y se dedicaban a la agricultura, la ganadería o la artesanía. Carecían de derechos y muchos de ellos vivían casi en la esclavitud.

Hacia el siglo XV, esta situación social cambia al surgir la burguesía, una vez que, de manera incipiente, empiezan a aflorar las ciudades. Esto supondrá una crisis en la ideología y la política medieval, que veremos en reflejada en obras como La Celestina.

El feudalismo era la organización político-económica de la sociedad medieval. En esta organización existían dos elementos importantes:

  1. El vasallaje, que consistía en la relación personal por la cual el vasallo había de ofrecer o cumplir unos servicios al señor a cambio de la protección de éste.

  2. El beneficio, que era el pago por dichos servicios, normalmente mediante la concesión de tierras.

La sociedad medieval era teocéntrica, en la que Dios era el centro de todo y la influencia de la iglesia era muy importante.

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II. Características generales de la literatura medieval

La literatura fue el reflejo de la sociedad medieval y de su mentalidad. Las principales características de la literatura medieval son:

  1. La importancia de la transmisión oral: Gran parte de la literatura se difundía mediante la recitación, dado que la población era analfabeta en su mayoría.

  2. El carácter anónimo de sus autores: Al principio, sobre todo, la literatura surge de la colectividad y luego va siendo modificada por los juglares o quienes la transmiten.

  3. La finalidad didáctica o moralizante: La influencia religiosa determina que, en muchos casos, la literatura se utilice para influir en los oyentes. Otras veces, la literatura sirve de propaganda de los valores de un rey o de un pueblo, como ocurrirá con los cantares de gesta.

  4. El uso del verso: Hasta bien entrada la Edad Media (siglo XIV), el verso será el modo usual de escribir, dada su facilidad para la recitación.

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III. La lírica tradicional en la Edad Media

La poesía lírica se manifestó de forma espontánea y fue la más extendida durante la Edad Media y surgió en todas las lenguas de la península ibérica: castellano, gallego, catalán y mozárabe. Estas composiciones se cantaban en los distintos actos de la vida, tal como lo demuestran sus contenidos: de boda, de siega, de romería, etc. Pero el tema constante y más importante era el del amor, como expresión, sobre todo, del sentimiento de la amada.

Aunque en cada zona de la península esta poesía de tema amoroso presenta sus particularidades, todas ellas comparten las siguientes coincidencias:

  1. Contenido: la enamorada se lamenta por la pérdida, ausencia o tardanza del amado.

  2.  Confidente: la muchacha expresa sus lamentos de amor a algo o a alguien: la madre, la hermana, la amiga, las olas del mar, las flores del campo, etc.

  3.  Motivos comunes: Suelen aparecen situaciones o motivos relacionados con el amor o el encuentro amoroso: el río y las fiestas, como lugar o momento para el encuentro amoroso; la cinta, como símbolo de virginidad, etc.

  4.  Estructura métrica: Las canciones se suelen adaptar a la estructura zejelesca o a la estructura paralelística.

La estructura paralelística consiste en la repetición de los versos, cambiando sólo la palabra de la rima. El leixaprén (deja y toma) es una forma especial de paralelismo que consiste en que una estrofa empieza con el mismo verso con el que había finalizado alguna estrofa anterior.

La estructura zejelesca era aquélla en donde se utilizaba el zéjel. El zéjel es un tipo de poema procedente de la poesía arábigo-andaluza y aparece en castellano en el siglo XIV. Está formado por versos octosílabos y tiene la siguiente estructura:

  • Estribillo: uno o dos versos.
  • Mudanza o glosa: tres o cuatro versos monorrimos.
  • Verso de vuelta: verso que rima con el estribillo.
  • Estribillo.

Existen en la península cuatro grandes núcleos líricos.

1. Lírica arábigo-andaluza

Se desarrolló en la mitad sur de España, en territorio mozárabe, lengua hablada por los hispanomusulmanes y formada por la mezcla de árabe y lengua romance. La manifestación poética más importante fue la jarcha, cancioncilla en lengua mozárabe que se incluía al final de poemas cultos, escritos en árabe o hebreo, llamados moaxajas. Las jarchas son las composiciones líricas más antiguas que se conocen y pudieron haber sido compuestas hacia el siglo 1000.

2. Lírica gallego-portuguesa

Se desarrolló al Noroeste de la península, en el territorio que hoy es Galicia y Norte de Portugal. La manifestación más importante de esta lírica es la cantiga de amigo que, al igual que las jarchas, son poemas de amor puestos en boca de una mujer que se lamenta por la ausencia, tardanza o abandono de su amado. Se caracteriza por una fuerte monotonía que se manifiesta en el uso limitado del vocabulario y de las estructuras sintácticas, basadas en la estructura paralelística de su métrica.

3. Lírica tradicional castellana

Es el núcleo lírico más tardío. Los primeros textos que recogen testimonio de este tipo de lírica compuesta en castellano datan del siglo XV. La composición más representativa es el villancico de amigo, que contiene el mismo tema y contenido que las jarchas y las cantigas de amigo y se desarrolla, normalmente, en estructura zejelesca, aunque también puede aparecer glosado en estructura paralelística.

Otros tipos de composiciones tradicionales castellanas son:

  1. Canción de amor puesta en boca del enamorado: En ellas es el hombre, y no la mujer, el que expresa sus quejas de amor.

  2. Canciones de boda, siega, romería, etc.: Recogen el mundo folclórico de la época.

  3. Canciones de serrana: Cuando la protagonista es una serrana a la que se le requiere de amores. A veces, es ella quien expresa sus quejas. Hay que señalar dos grupos dentro de este tipo de composiciones:

    1. Aquél en que aparece una serranilla, de carácter refinado y cortés.

    2. Aquél en que aparece una serrana forzuda y corpulenta, capaz de cargar a cuestas al caballero y donde el elemento erótico es importante.

  4. Canciones de albada: Aquéllas en las que el tema del amor se desarrolla al llegar el alba. También encontramos de dos clases:

    1. la albada, que cuenta la separación de los amantes al amanecer.

    2. La alborada, en la que los amantes se citan al llegar la mañana.

4. Lírica catalano-provenzal

Surge en el siglo XII en las cortes provenzales. Es un tipo de poesía refinada, cantada por los trovadores en los palacios y casas señoriales para distraer a los grandes señores. Influye en otros tipos de lírica tradicional de la península mediante la cansó, la pastorela o la albada, así como con la ideología del amor cortés, juego poético en donde se establece un paralelismo entre la relación vasallo-señor feudal y enamorado-dama. Así, al hablar de las relaciones entre el poeta y la dama se utiliza un léxico feudal: se llama midons (mi señor) a la dama.

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IV. El mester de juglaría, la épica castellana y el Poema de Mío Cid

1. El mester de juglaría

El género principal de la poesía épica fue el de los cantares de gesta, extensas narraciones en verso en las que se exaltan las hazañas y las virtudes de los héroes.

La poesía épica se encuadra dentro del mester de juglaría, esto es, la escuela poética propia de los juglares. Los cantares de gesta eran recitados de memoria por los juglares que actuaban en las plaza de los pueblos y ciudades, en los castillos o en las estancias de la corte, a cambio de un pago por sus servicios. Sabían danzar, tocar instrumentos, recitar y realizar ejercicios acrobáticos y circenses.

2. Características de la épica española

Los cantares de gesta surgieron entre los siglos XII y XIII. Se han conservado muy pocos debido a que su transmisión era oral y no escrita. Además del Poema de Mío de Cid, que se conserva casi completo, nos han llegado fragmentos delCantar de Roncesvalles y del Cantar de las Mocedades de Rodrigo. De otros cantares de gesta nos han llegado noticia a través de crónicas históricas que los utilizaron como fuente.

Otras características de los cantares de gesta de nuestra literatura son: su carácter anónimo, pues el autor no los firmó; su gran vitalidad, pues sus temas pervivieron en la literatura posterior (romancero, comedia nacional, drama neoclásico, romántico y moderno, en la lírica, en la novela, etc.); su realismo, pues se compusieron en fechas cercanas a los hechos que cuentan y apenas aparecen elementos fantásticos.

3. El Poema de Mío Cid

El Poema de Mío Cid, obra de los siglos XI o XII, es un extenso poema épico, máximo exponente del mester de juglaría (poesía hecha por los juglares), que cuenta las hazañas de Rodrigo Díaz de Vivar, quien por dos veces pierde su honor y lo recupera con creces. La obra está dividida en tres partes o cantares:

  1. El cantar del destierro: Narra cómo El Cid es desterrado por pedir juramento al rey Alfonso VI. El héroe abandona Castilla después de dejar a su mujer e hijas en el monasterio de San Pedro de Cardeña. Ya en tierra de moros, entabla diversas batallas por Castejón, Alcocer, Calatayud, hasta llegar a Huesca, Zaragoza y Lérida. En estas escaramuzas hace preso al conde de Barcelona.

  2. El cantar de las bodas: El Cid conquista Valencia, envía un regalo al rey y su mujer e hijas se reúnen con el héroe en sus nuevas tierras. Los infantes de Carrión solicitan el casamiento con las hijas de El Cid, para lo cual intercede el rey.

  3. El cantar de la afrenta de Corpes: Los infantes de Carrión, hombres cobardes, no soportan las burlas de los hombres de El Cid y deciden vengarse en las hijas del caballero castellano, a las que azotan y abandonan en el robledal de Corpes. Ante esto El Cid pide justicia al rey, quien convoca unas cortes donde se restaura el honor afrentado. Las hijas de El Cid terminan casándose con los infantes de Navarra y Aragón.

La métrica del Poema de Mío Cid es irregular: realizado en versos cuya medida fluctúa entre 10 y 20 sílabas aunque predominan los de 13, 14 y 15 y que se agrupan en tiradas (grupos de versos con una sola rima asonante).

De su estilo cabe destacar:

  1. El uso del epíteto épico, para enaltecer y magnificar al héroe («el que en buena hora nació», «el que en buena hora ciñó espada»).

  2. Fórmulas dirigidas al oyente, con el fin de comunicarse con él y de que participe en la narración («Como oiréis contar», «Bien oiréis lo que dirá»). – o elementos simbólicos (movimientos de los personajes, elementos decorativos, etc.).

  3. Episodios humorísticos, cuya función principal era la de divertir al auditorio e introducir un momento de distensión en medio de sucesos dramáticos (episodio de las arcas en el cantar I; el episodio del Conde de Barcelona al final del cantar I; el episodio del león en el cantar III).

En cuanto al personaje protagonista hay que destacar su conducta ejemplar. Se nos presenta como un hombre de conducta intachable: es valiente, astuto, prudente, amoroso padre de familia, con gran conciencia de su honra y un fuerte sentimiento religioso.

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V. El mester de clerecía. Los Milagros de Nuestra Señora, de Gonzalo de Berceo y el Libro del Buen Amor, del Arcipreste de Hita

1. El mester de clerecía

La otra escuela poética existente en la Edad Media fue el mester de clerecía. Tuvo su apogeo durante los siglos XIII y XIV y a ella pertenecen los clérigos y los autores cultos.

La característica formal más notable de esta escuela es la utilización de lacuaderna vía, estrofa de cuatro versos con la misma rima (monorrimos) consonante.

2. Los Milagros de Nuestra Señora, de Gonzalo de Berceo

Los Milagros de Nuestra Señora es la obra más importante de Gonzalo de Berceo. Comienza con una introducción alegórica en la que el autor se presenta a sí mismo en una naturaleza idealizada, descanso del hombre, que simboliza las virtudes y perfecciones de la Virgen.

A continuación, se suceden veinticinco milagros realizados por la Virgen a favor de personas que sienten una gran devoción por ella. Berceo no inventa, sólo pretende difundir en lengua romance los relatos ya existentes sobre la Virgen, los cuales él modifica con libertad. Las principales características de losMilagros son las siguientes:

  1. Berceo introduce elementos cotidianos para atraer a sus oyentes.

  2. Introduce un tono humorístico y emplea metáforas y comparaciones espontáneas.

  3. Introduce elementos del arte juglaresco, como el uso de expresiones para llamar la atención de sus oyentes.

  4. Al final de cada relato aparece una moraleja o enseñanza para hacer comprender al oyente las ventajas que reporta ser un devoto de la Virgen.

Se pueden distinguir tres grupos de milagros:

  1. En los que María premia o castiga a los hombres, como «La casulla de San Ildefonso».

  2. En los que la Virgen perdona y logra salvar de la condenación a sus devotos, como «El sacristán impúdico».

  3. En los que los personajes sufren una crisis espiritual y María les ayuda a solucionar el conflicto, como «La abadesa encinta».

El personaje de la Virgen aparece dotado de sentimientos humanos. Así, unas veces se comporta como una mujer celosa y otras veces se enfada con los que no la sirven.

3. El Libro de Buen Amor, del Arcipreste de Hita

El Libro de Buen Amor es una composición extensa y variada de 1700 estrofas, cuyo hilo conductor lo constituye el relato de la autobiografía ficticia del autor, quien es representado por don Melón de la Huerta.

El libro se caracteriza por su gran variedad: de contenido (ejemplos, narraciones amorosas, serranillas, elementos didácticos, composiciones líricas, etc.); métrica (además de la cuaderna vía utiliza estrofas de dieciséis versos, estrofas zejelescas, etc.); de tono (serio, festivo, religioso, profano, etc.).

Se distinguen, entre otros, los siguientes elementos en la obra:

  1. Una introducción donde el autor explica el sentido e interpretación del libro.

  2. Una autobiografía ficticia del autor, que consiste en narrar sus amores con distintas mujeres, ayudado por Trotaconventos.

  3. Una narración de los amores de don Melón y doña Endrina.

  4. Una colección de ejemplos, fábulas y cuentos, que sirven como enseñanza moral y cierre de los episodios.

  5. El relato alegórico de la batalla de don Carnal y doña Cuaresma.

Es importante el uso de la parodia y la ambigüedad en la obra, lo que influye en la verdadera intención de la misma. Así, por un lado, se puede deducir un carácter moralizante y didáctico cuando nos muestra la lección moral sobre la infelicidad y el alejamiento de Dios que provoca el loco amor. Pero, por otro, el tono de algunos pasajes invita al goce de los placeres de la vida.

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VI. La prosa medieval: El Conde Lucanor

1. La prosa medieval

Hasta el siglo XII toda la prosa literaria estaba escrita en latín. Tras el impulso y madurez que la lengua castellana adquirió durante ese siglo con la labor de Alfonso X el Sabio -que reinó entre 1252 y 1284- y la Escuela de Traductores de Toledo, aparecen algunos textos narrativos escritos en lengua romance: colecciones de cuentos, como el Libro de Calila e Dimna, o recopilaciones de sentencias, como el Poridat de Poridades.

2. El Conde Lucanor

El Conde Lucanor (1282-1340) es la obra principal de Don Juan Manuel, sobrino de Alfonso X el Sabio, quien la escribió en el siglo XIV y quien afianzó la prosa literaria en castellano. El libro está formado por 50 ejemplos con la misma estructura: El Conde Lucanor pide consejo a su ayo Patronio, sobre problemas que se le plantean. Éste le narra un cuento que le ofrece la solución. Cada narración acaba con una moraleja que resume la lección aprendida.

Todas las narraciones de estos cuentos tienen la misma estructura:

  1. Introducción: El Conde Lucanor tiene un problema y le pide consejo a Patronio.

  2. Núcleo: Patronio cuenta un cuento que se asemeja al problema planteado.

  3. Aplicación: Patronio aconseja la manera adecuada de solucionar el problema, en relación con el cuento narrado.

  4. Moraleja: Se termina con dos versos en los que el autor resume la enseñanza de la narración.

En la obra se utilizan cuentos de diferentes procedencias (árabes, clásicos, etc.). En todos los cuentos es patente la intención didáctica, al dar soluciones a los problemas que a una persona pueden planteársele en su vida.

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VII. Las Coplas por la muerte de su padre, de Jorge Manrique

Las Coplas por la muerte de su padre, de asunto moral, es la obra más importante de Jorge Manrique (1440-1479). Esta obra, realizada con motivo de la muerte de su progenitor, pertenece al género poético de la elegía y es una reflexión sobre la vida, la fama, la fortuna y la muerte con resignación cristiana. Está formada por cuarenta coplas, cada una de las cuales se compone de dos sextillas, coplas manriqueñas o coplas de pie quebrado, cuyo esquema métrico es 8a, 8b, 4c, 8a, 8b, 4c. El ritmo de las estrofas es lento e interrumpido por los tetrasílabos, dando así un tono funeral a la composición.

En cuanto al contenido, las Coplas forman una elegía por la muerte del padre del autor, don Rodrigo Manrique, donde el poeta se lamenta de la inestabilidad de la fortuna, la fugacidad de las cosas humanas y de la vida, del poder igualatorio de la muerte. La fama es lo único duradero: esta forma de pensar anuncia la llegada del próximo Renacimiento.

Otros temas que aparecen en la obras son:

  1. El paso inexorable del tiempo.

  2. La vida como camino.

  3. La vanidad de las cosas mundanas.

  4. El tema del Ubi sunt para evidenciar la fugacidad de la vida.

  5. El tema de la fortuna.

  6. La descripción de don Rodrigo Manrique.

  7. La visión cristiana de la muerte.

  8. Los tres tipos de vida: terrenal, de la fama y eterna.

La estructura de las Coplas va de lo general a lo particular:

  1. Habla en un sentido general sin aludir a nadie (coplas 1-14).

  2. Pone ejemplos de los dicho anteriormente en personas de la época, utilizando el tema clásico del Ubi sunt (coplas 15-24).

  3. Se centra por fin en la figura del padre, al que alaba como un ejemplo de virtud (coplas 25-40).

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VIII. El Romancero

El romance es una composición poética de carácter épico-narrativo nacida para ser cantada, formada por versos octosílabos con rima asonante en los pares y cuyo origen se encuentra en los cantares de gesta. El interés por éstos, con el paso del tiempo, fue decayendo y sus fragmentos más atrayentes fueron transformados en romance mediante la ruptura de cada uno de los versos de aquél en dos partes para formar cada uno de los versos del romance.

Se denomina Romancero al conjunto de romances cantados por los juglares desde finales del siglo XIV hasta el siglo XV. Los escritos durante los siglos XV y XVI por autores conocidos, como Cervantes, Lope de Vega, Góngora o Quevedo, forman el Romancero Nuevo.

El romance es una composición creada por la colectividad, por lo que su autor es anónimo y constituye también la razón de que existan múltiples versiones de un mismo romance.

Por su tema, los romances pueden clasificarse en:

  1. Tradicionales: Provienen de un hecho histórico o de los cantares de gesta.

  2. Juglarescos: Su origen es diferente de los anteriores.

    1. de Tema francés:

      1. Carolingios: cuentan las hazañas de Carlomagno y otros personajes de su corte.

      2. Bretones: recogen las leyendas del rey Arturo y los caballeros de la Tabla Redonda.

    2. Noticieros: Vienen derivados de la convivencia con los árabes y pueden ser fronterizos y moriscos.

    3. De invención: Fruto de la imaginación de los autores.

      1. Líricos: Tratan el tema amoroso y la expresión de sentimientos. Predomina la descripción y la acción es escasa.

      2. Novelescos: Destaca el elemento narrativo, la ficción y el diálogo entre los personajes.

Por su estructura, el romance puede ser:

  1. Romance-cuento: relata una historia completa de principio a fin.

  2. Romance-escena: se concentra en un momento concreto de la acción.

Los romances presentan rasgos de estilo propios de la tradición oral:

  1. Uso de arcaísmos.

  2. Alusión a los oyentes.

  3. Utilización del fragmentarismo o truncamiento: la acción se interrumpe al final, dejando el desenlace a la imaginación del oyente o lector.

  4. Variedad en las formas verbales, mediante la aparición de distintos tiempos en un mismo romance.

  5. Uso de fórmulas para expresar sentimientos, circunstancias espaciales y temporales, etc.

  6. Lenguaje sencillo y con gran capacidad de sugerencia.

  7. Uso de repeticiones, paralelismos y aliteraciones.

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IX. La Celestina, de Fernando de Rojas

La Celestina es el título por el que se conoce la Comedia o Tragicomedia de Calisto y Melibea, la cual fue publicada en dos versiones diferentes: una en 1499, que constaba de 16 actos; y otra, en 1508, que tiene 21 actos. Pertenece al género de la comedia humanística, género inspirado en la comedia latina, que estaba destinado a ser leído y no representado.

El autor es Fernando de Rojas, nacido en Puebla de Montalbán (Toledo), hacia 1475, de familia conversa (judíos convertidos al cristianismo), que estudió leyes en Salamanca y fue alcalde de Talavera de la Reina. Murió en 1541.

La obra cuenta cómo Calisto, joven noble, entra en un jardín para recobrar su halcón perdido, y allí conoce a Melibea, de la que se enamora y la que le rechaza inicialmente. Calisto, por consejo de su criado Sempronio, contrata los servicios de Celestina para alcanzar los favores de la muchacha. Aquélla consigue con sus trucos concertar una cita entre Calisto y Melibea y, como premio, recibe del enamorado una cadena de oro. Sempronio y Pármeno, criados de Calisto y socios de Celestina en el negocio, reclaman su parte. La anciana se niega al reparto y ambos la asesinan, crimen por el que son ajusticiados. Sus compañeras, Elicia y Areúsa, deciden vengarse por lo sucedido en las personas de los amantes contratando a Centurio. Una noche, estando Calisto con Melibea, al oír los ruidos provocados por Centurio y sus acompañantes, el amante resbala de una escala y muere. Melibea, desesperada, se arroja al vacío desde una torre de la casa de su padre, Pleberio, quien cierra la obra con un lamento por su hija muerta.

El rasgo más llamativo de la obra es su realismo psicológico, al retratar el ambiente burgués y la sociedad en crisis de la época. Se refleja una nueva clase de criados y su relación meramente económica con sus amos. Se pone en evidencia la crisis de los ideales heroicos y religiosos frente a la importancia que adquiere el dinero.

Los personajes celestinescos también muestran una perfecta caracterización:

  • Melibea es una mujer enérgica y que toma sus propias decisiones. Es arrogante, apasionada, hábil para improvisar y con un carácter fuerte.

  • Calisto se muestra débil de carácter, que olvida sus obligaciones y sólo piensa en sí mismo y en el interés sexual por Melibea.

  • Celestina se presenta como una persona vital, movida fundamentalmente por la codicia.

  • Los criados no guardan fidelidad a su amo y buscan su propio beneficio también. Esta actitud la muestra Sempronio desde el principio y Pármeno una vez que es despreciado por Calisto.

El lenguaje se muestra también con total realismo. Así, se utiliza el lenguaje culto -lleno de figuras retóricas, sintaxis latinizante, latinismos, frases largas, etc.) y el lenguaje vulgar -repleto de obscenidades, palabras malsonantes, amenazas, refranes, etc.). Cada personaje utiliza el nivel del lenguaje que le es propio. Celestina utilizará el que más le interese en función del personaje con el que hable. También sería de destacar el uso del aparte, que consiste en una convención del teatro por la cual uno de los personajes habla sin que lo oiga su interlocutor.

La intención de la obra es claramente moral: advertir de los peligros del amor desenfrenado y de los engaños de criados y alcahuetas ante la ingenuidad de los locos amantes. Muestra una visión pesimista de la vida, fruto, tal vez, de la crisis social de la época.